¿Es la primera vez que vas a tener un gato como mascota? ¡Es muy normal que tengas dudas! Pero eso es buena señal: significa que vas a ser un propietario o propietaria responsable que se preocupa por que a su gatito no le falte de nada. ¡Aquí tienes una lista de todo lo que debes saber!
Cosas que debes plantearte antes de tener un gato
Primero, párate a pensar: ¿seguro que puedes tener un gato en casa?
Antes de traer a un felino a tu hogar debes sentarte y hacerte varias preguntas. Empieza por plantearte cómo te has sentido al estar cerca de otros gatos.
¿Te gusta jugar con ellos y acariciarlos o te dan miedo porque te pueden clavar las uñas? ¡Recuerda que esto podría pasar!
Además de esto, cuando has compartido espacio con un gato, ¿te han picado los ojos, has estornudado o has sentido algo extraño? Puede que tengas alergia a los felinos y si es así, quizás no sea buena idea adoptarlo.
A veces nos dejamos llevar por la adorable apariencia de los animales y algunos se aventuran a llevárselos a casa sin pensar. Si nunca te has relacionado con un minino, nuestro consejo es que, antes de tener un gato, compartas tiempo con alguno.
Por ejemplo, puedes presentarte voluntario en un refugio para ayudar y de esa manera interactuarás con ellos. Verás si sientes afinidad con estos animales y si no te causan ningún tipo de alergia. También puedes hacerte las pruebas para descartar esto último.
Por otro lado, plantéate si económicamente puedes hacerle frente al gasto que supone tener una mascota.
Su alimento, sus juguetes, sus visitas al veterinario con sus correspondientes vacunas y desparasitaciones, etc. Todo ello supone un coste que tienes que asumir, además, teniendo en cuenta que la esperanza de vida de un gato suele rondar los 15 años, aunque se han dado casos en los que han llegado a los 20 y más.
¿Vas a pasar muchísimo tiempo fuera de casa? Es verdad que los gatos no son tan dependientes como los perros y no hace falta sacar de paseo a los felinos, pero sí que requieren de tu atención.
Es muy importante que le dediques un tiempo diario a su educación, diversión y socialización para que vuestra relación funcione.
Por último, es posible que quieras tener un gato, pero no sepas dónde conseguirlo. Nuestro consejo SIEMPRE será que adoptes a uno de un refugio o protectora. ¡Allí hay miles de animalitos esperando una oportunidad!
Objetos necesarios para tener un gato en casa
Si has analizado todas las cuestiones posibles y ya sabes a ciencia cierta que quieres y puedes tener un gato por primera vez, ¡ahora hazte una lista con todas las cosas necesarias para él!
El transportín
Para empezar vas a necesitar un transportín para trasladarlo cada vez que sea necesario. Por ejemplo, cuando lo saques de la protectora de animales o lo lleves al veterinario.
Recuerda que el gato crecerá, por lo que intenta adquirir uno que te sirva para toda su vida.
Por cierto, los gatos odian entrar en el transportín, por lo que cuando llegue a tu vida tendrás que acostumbrarle poco a poco a él.
El comedero y el bebedero
Para poner su comidita y su agua, debes tener, al menos, un plato para cada cosa. Y decimos «al menos» porque siempre es buena opción tener un segundo plato de agua en otro rincón de la casa donde sea habitual ver a tu gato.
En ambos casos, los ideales son los de cristal, porcelana o acero inoxidable, ya que son los más higiénicos, no producen alergias y son los que menos olores acumulan. Aun así, recuerda que limpiar los cuencos de tu mascota es esencial para su salud.
Los rascadores
¡Importantísimos! Son uno de los elementos más esenciales para los gatos. Les divierten, les hacen ejercitarse, reducen su estrés, les sirven para limar las uñas… ¡tener un gato sin tener un rascador es un gran error!
Hay diversos tipos de rascadores, pero hay uno en especial que encanta a los felinos: ¡el de tipo árbol!
Y es que este, además de contar con varios niveles para que los gatos escalen, tiene refugios en los que el animal se puede esconder. A los gatos les gusta bastante esconderse y la intimidad, así que es normal que estos rascadores sean sus preferidos.
Aun así, lo ideal es que tu felino cuente con varios rascadores repartidos por el hogar, por lo que puedes optar por otros más sencillos. Créenos cuando te decimos que tu gato y tu mobiliario lo agradecerán
El cajón de arena
Tan importante como el rascador, es tener un cajón de arena para tu gato. ¡O varios! Puede que aprenda solo a usarlo o que tengas que enseñar a tu gato a utilizar su arenero, pero será ahí donde haga sus necesidades, así que es un aprendizaje necesario.
Encontrarás en el mercado diversos tipos de areneros: de diferentes tamaños, más altos o más bajos, cubiertos o descubiertos. Lo importante es que tengas en cuenta el tamaño de tu gato, ya que, por ejemplo, si es un gato cachorro y el arenero es alto, le costará entrar.
En cuanto a la arena, también hay muchos tipos en el mercado. Las más recomendables son las arenas aglomerantes ya que absorben mejor. Hay algunas arenas que sueltan partículas de polvo que pueden provocar alergia en el gato, así que es mejor evitarlas.
Juguetes
Pero no solo basta con tener un rascador para tu gato. Es muy importante que el felino cuente con juguetes para que se entretenga y mantenga su mente activa.
Las pelotas con cascabeles o los pequeños peluches son fantásticos, ya que les permite practicar su instinto cazador.
Por otro lado, como dijimos al principio, que tú juegues con él es muy importante para su educación y socialización. Para ello, los juguetes de tipo caña son fantásticos. Nunca debes emplear tus manos para jugar con él, ya que puede traerte problemas con el tiempo. ¡De esto hablaremos más adelante, así que te invitamos a que sigas leyendo!
Aseo
No deben faltar los elementos de aseo de los gatos.
Peinar a tu felino con frecuencia te ayudará a eliminar el pelo muerto, evitando que lo suelte por casa o que se lo trague formando bolas de pelo en su estómago cuando se lame para asearse a sí mismo.
Por otro lado, de vez en cuando, va a ser necesario que le cortes las uñas a tu gato. Si te sientes capaz, entonces necesitarás tener un cortauñas apropiado para ellos. Recuerda que es una labor muy delicada que, de hacerse mal, causaría mucho daño a tu mascota. Por eso, si no te ves capaz en mejor que recurras a un profesional.
La salud dental de las mascotas es la más olvidada por parte de los dueños. Limpiar los dientes a tu gato es una tarea a la que lo debes acostumbrar desde cachorro y, para ello, vas a necesitar un cepillo especial.
Por último, aunque bañar a los gatos no es necesario en la mayoría de los casos, puede pasar que tu gatete se dé un baño de barro y requiera una limpieza en casa. Para ello, deberás tener a mano un champú especial para gatos.
Aunque si la suciedad es poca, tener toallitas higiénicas para mascotas te ayudará.
Comida apropiada
Por último, pero no menos importante, si vas a tener un gato por primera vez y no tienes ni idea sobre su alimentación, lo recomendable es que te dejes aconsejar por un profesional veterinario.
En la clínica veterinaria, examinarán a tu gatete y te recomendarán el mejor alimento basándose en sus necesidades. ¡Es muy importante que alimentes a tu gato correctamente en cada etapa de su vida!
Consejos si vas a tener un gato por primera vez
Ahora que ya estás seguro de que vas a tener un gato y qué elementos básicos necesita, pasemos a los consejos que debes tener en cuenta.
1. Asegura ventanas y balcones
Si vas a tener un gato por primera vez quizás no lo sepas, pero la mayoría de los felinos tienen tendencia a saltar desde grandes alturas. Esto es conocido como el síndrome del gato volador y en ocasiones puede ser fatal.
Por eso, lo ideal es que protejas ventanas y balcones para que tu gato campe a sus anchas o bien, que los mantengas cerrados siempre que tu felino vaya a acceder a ellos.
2. Protege tus muebles
Y aquí volvemos a destacar la importancia de los rascadores. Si no los tienen cerca o mientras se acostumbran a ellos, es muy probable que tu gato ataque tus cortinas y muebles con sus uñas.
Para ello, puedes intentar protegerlos. Por ejemplo, recoge tus cortinas para que no cuelguen hasta el suelo o utiliza una funda para proteger la tapicería de tu sofá.
3. No juegues con tus gatos usando las manos
Muchas personas se preguntan «¿por qué mi gato me muerde las manos?«.
La respuesta suele ser que han acostumbrado al gato desde pequeño a jugar con las manos. Por ejemplo, poniéndoselas delante de la cara para que las atrapase. Cuando los gatos crecen, piensan que las manos son un juguete, de ahí que vayan a morderlas o arañarlas continuamente, con el daño que eso supone.
Por eso, lo ideal es que, a la hora de jugar con tu gato, lo hagas empleando juguetes.
4. No le obligues a ser lo que no es
En el mundo felino hay de todo. Encontrarás gatos cariñosos y otros que no lo son tanto. A la hora de tener un gato, debes comprender su esencia y permitirle ser como es.
Un gato no es un perro, por mucho que algunas personas se empeñen en intentar que se parezcan.
A los felinos les gusta la soledad y también el cariño, pero es mejor que sean ellos quienes nos busquen cuando quieran mimos. Obligar a un gato a permanecer quieto mientras le acaricias es un error que puede ocasionarte más de un arañazo. E igual que esto… ¡hay muchas más cosas que los gatos odian y que deberías tener en cuenta!
5. Debes educarle en positivo
Igual que debes enseñar a tu gato que las manos no son un juguete y que no debe morderte, tienes que emplear tiempo en la educación de tu felino.
Enseñarle a usar el arenero, a no morder las cosas, etc. Todo ello requerirá de tu tiempo y paciencia. La educación en positivo siempre es la clave a la hora de tratar con un animal, por ello, los gritos, golpes y castigos, están totalmente prohibidos.
6. Dos gatos mejor que uno
Sí, sabemos que suena a locura. Estás aquí intentando averiguar lo necesario para tener un gato por primera vez y nosotros te decimos que te aventures a tener dos.
Obviamente, esto lo decimos siempre y cuando puedas responsabilizarte de ambos. Y es que dos gatos juntos se entenderán, jugarán, se harán compañía… y esto, si pasas muchas horas fuera de casa por trabajo, es hacerle un favor a tu mascota.
Si llevas a los gatos a la vez a casa la adaptación será mucho más fácil. Si ya tienes uno y ahora vas a llevar al segundo, tómate un tiempo para presentarlos y acostumbrar a los dos gatos a convivir.
7. Evita que sufra estrés
Hay pequeñas cosas de nuestro día a día que pueden estresar a tu gato: las visitas, los cambios… tenlas en cuenta todas para evitar que tu felino se estrese y acabe enfermo.
8. ¡Cuida su salud e higiene!
Y, por último, lo más básico de todo: si vas a tener un gato es para cuidar de él.
Esto implica que, además de todo lo anterior, mantengas sus vacunas y desparasitaciones al día, lo alimentes correctamente, estés pendiente de cualquier síntoma anómalo que pueda indicar problemas de salud y lo mantengas limpio a él y a su entorno (¿sabías que uno de los motivos por los que los gatos no usan el arenero es porque odian que estén sucios?).
Mima a tu gato (siempre respetando sus decisiones), juega con él y disfruta de su compañía. ¡Tener un gato es una experiencia maravillosa!