Si te enfrentas al cuidado de tu primera mascota, es normal que te surjan dudas sobre si lo estás haciendo bien o no. Lo cierto es que aun habiendo tenido animales de compañía durante toda nuestra vida, quizás estemos pasando algo por alto. Por eso, hoy te traemos las claves para saber si realmente eres un propietario de mascotas responsable.
Las claves para ser un propietario de mascotas responsable
¡Comprueba si has seguido estos pasos a la hora de tener a tu mascota!
1. Tuve en cuenta mi situación antes de adoptar
Antes de adoptar a una mascota, debemos pararnos a analizar nuestra situación para comprobar si realmente es el mejor momento.
Las mascotas no son caprichos, son seres vivos con necesidades que dependen de nosotros.
Por eso, entre las preguntas que debes hacerte antes de adoptar están: ¿puedo hacerme cargo económicamente? ¿Tengo el suficiente espacio en casa? ¿Tengo tiempo para dedicarle a sus cuidados, paseos y educación? ¿Soy alérgico?
Si te planteaste todas estas cuestiones y el resultado fue positivo, ¡empezaste por buen camino!
2. Tiene su propio espacio
No nos referimos a que tu mascota tenga una habitación para ella sola. Nos referimos al hecho de que tenga su camita, sus juguetes y un lugar fijo donde coloques su bebedero y su plato de comida.
Para los animales esto es muy importante, ya que es una zona en la que se sienten seguros.
En caso de tratarse de una mascota como un hurón o un conejo, también requieren de unas jaulas amplias donde descansar en los momentos en los que no estén correteando por una estancia segura de tu hogar.
Adoptar a un animal para tenerlo a la intemperie, sin ningún tipo de cobijo, no es de ser responsable.
Además, el animal no solo necesita su propio espacio físicamente hablando. Ser un propietario de mascotas responsable es entender al animal y saber cuándo necesita estar solo y cuándo quiere cariño o juegos.
3. Conoces sus necesidades alimenticias
Desde Wakyma no nos cansaremos de repetir que alimentar a un animal no es simplemente rellenarle el cuenco de comida. Es conocer a la mascota y sus necesidades. Por ejemplo, un cachorro no come lo mismo que un adulto, sea el animal que sea.
Un animal con problemas renales o diabetes, necesitará un alimento específico acorde con su enfermedad y que no empeore su estado.
Del mismo modo, cuando nos referimos a conocer sus necesidades alimenticias hablamos también de las dosis. Hay que saber qué cantidades de comida son las adecuadas para el animal para no darle de más o de menos. ¡Ambas cosas pueden hacerle enfermar!
Y, por supuesto, siempre tratándose de comida de calidad. Los alimentos comerciales de baja calidad utilizan muchos subproductos, aditivos químicos, etc. y eso no es bueno para la salud de las mascotas. Cuanto más naturales sean los ingredientes en la dieta, mejor.
Eso sí, ¡eso no significa que le des las sobras de tu comida! Si eres un propietario de mascotas responsable sabrás que hay alimentos que son muy tóxicos para perros, para los gatos o prohibidos para los hurones, para las cobayas, para los loros, etc.
4. Lo llevas al veterinario
Ser un propietario de mascotas responsable también es poner en manos de profesionales su salud.
La correcta vacunación y desparasitación de tu mascota es esencial para empezar con buen pie, especialmente cuando son cachorros, ya que con ellas evitarás enfermedades mortales en tu mascota.
Pasadas las primeras vacunas, siempre habrá que estar atento a los avisos del veterinario sobre los refuerzos de las mismas y la desparasitación periódica. ¡No dejarlo pasar te hará un propietario de mascotas responsable!
Por otro lado, es importante que si tu mascota presenta síntomas de dolor o enfermedad, acudas al veterinario para tratar el problema. A veces, una rápida reacción por tu parte es la diferencia entre que tu mascota viva o muera.
5. Le permites que se ejercite físicamente
¡El ejercicio diario es esencial para las mascotas!
Si tienes un perro, sacarlo de paseo diariamente, mínimo 2 o 3 veces, durante unos 30 minutos cada uno, es de vital importancia. No solo le servirá para hacer sus necesidades fuera de casa, también podrá hacer ejercicio físico.
En el caso de los gatos, los expertos no recomiendan sacarles de paseo, puesto que es una actividad que puede causar mucho estrés en el animal si no está acostumbrado. Así que en su caso, lo mejor es que, si vives en una zona segura, le dejes explorar a su aire. Si es un gato casero, entonces la exploración debe ser por casa, permitiéndole que investigue cada rincón.
Aun así, si quieres sacar a tu gato de paseo, lo recomendable es que le acostumbres al uso del arnés y la correa primero, y luego, poco a poco, a las salidas. Eso sí, si notas que tu gato se estresa muchísimo, ¡no le obligues!
En el caso de mascotas como hurones, cobayas, conejos o hámsters, es muy importante también que correteen y jueguen diariamente fuera de sus jaulas.
Para ello, antes de sacarlos, debes habilitar una zona segura libre de peligros potenciales para el animal y vigilarlo.
6. Está correctamente identificado
Para ser un propietario de mascotas responsable, tus animales de compañía deben estar identificados con un chip y, además, si se trata de un animal que sale a la calle, debe ir equipado con un collar con chapa identificativa con su nombre y tu teléfono (por si se pierde) y la correa.
En caso de tratarse de una raza de las catalogadas como potencialmente peligrosas, deberás tener en regla la licencia PPP y cumplir todas las normas establecidas para estos casos, como por ejemplo, el uso de bozal.
7. Recoges sus heces
Y no, no solo nos referimos a recogerlas si se les escapa un pipí dentro de tu casa. ¡No referimos a retirarlas siempre de la vía pública!
Ser un propietario de mascotas responsable no solo es serlo con tu mascota, también es serlo frente a los demás y responder por ella en estos casos.
Lleva siempre contigo bolsitas para recoger sus heces y una botella con agua y jabón o vinagre para limpiar las zonas donde orine y evitar los malos olores.
8. Te encargas de su higiene
Mantener a tu mascota limpia también es signo de ser un propietario de mascotas responsable.
Es verdad que hay animales, como los gatos y los conejos, que son muy higiénicos por sí mismos, pero también necesitan de tu ayuda.
Bañar a tu mascota, peinarla, cortarle las uñas, limpiarle los dientes, limpiarle las orejas, lavar sus pertenencias (cama, juguetes, comedero, bebedero, etc.), limpiar jaulas… todo esto no lo pueden hacer por ellas mismas, así que asegúrate de mantener su higiene al día. ¡Una mala higiene física y de su entorno afectará gravemente a su salud!
9. Lo estimulas mentalmente
Tan importante es el ejercicio físico para las mascotas como el mental.
El aburrimiento puede ocasionar problemas de conducta y estrés en los animales, por eso, es esencial que estimules su mente con juegos.
Hay juguetes específicos para cada animal, algunos simplemente destinados al entretenimiento y otros, además de eso, a fomentar su inteligencia.
Además, es también muy importante que tú dediques tiempo diariamente a jugar con tu mascota. No solo le aportarás salud y diversión, sino que te permitirá conocer a tu fiel amigo mejor y establecer lazos afectivos con él.
10. Lo educas y socializas
La educación y socialización de un animal debe comenzar desde que este es cachorro. De esta manera es más fácil que aprenda. Sin embargo, a veces la mascota llega a tu vida siendo ya adulta, pero eso no es excusa para no fomentar su educación y socialización.
La educación no se basa solo en aprender trucos para que el animal resulte gracioso y presumir de «mira lo que hace» delante de nuestros conocidos. Se basa en aprender las normas de comportamiento básicas para que la convivencia contigo y con tu entorno se la correcta.
Se trata también de hacerle entender al animal, siempre desde el cariño y con el refuerzo positivo, que tú eres el líder y que debe obedecer tus órdenes.
Por su parte, la socialización es importante para que el animal tenga una buena relación con personas, otros animales y con su entorno.
Una socialización deficiente derivará en problemas de conducta en él, así que es de ser un propietario de mascotas responsable tenerla en cuenta. Recuerda que si no te ves capaz, siempre es adecuado recurrir a un educador y/o etólogo experto.
11. No lo dejes al sol
Mención especial hacemos a este acto, ya que el golpe de calor en perros, en gatos o en otros animales es una de las causas de muerte de mascotas más frecuentes en verano.
Y es que dejar a tu mascota expuesta al sol sin ningún resquicio de sombra o encerrada en el coche aunque sea por escasos minutos, puede ser fulminante para ella.
¡Jamás dejes a tu animal de compañía bajo el sol o encerrado a altas temperaturas si no quieres que pierda su vida!
12. Esteriliza o castra a tu mascota
Las camadas no deseadas son uno de los motivos más frecuentes de abandono animal.
Si no quieres que tu mascota tenga cachorros, sé responsable y esterilízala o cástrala a tiempo.
Además, con esto no solo evitarás embarazos indeseados, sino que la esterilización y la castración evita muchas enfermedades tanto en machos como en hembras, como enfermedades próstata, cáncer de mamas, embarazos psicológicos, etc.
13. Y jamás, JAMÁS le abandones
Obviamente, esto es clave. Un propietario de mascotas responsable jamás abandonaría a su fiel amigo.
Si a pesar de haber cumplido todos los requisitos y haber podido tener a tu mascota llega un momento en el que no puedes hacerte cargo de ella por una causa de fuerza mayor, como es una enfermedad, deja a tu mascota en manos de alguien conocido que pueda hacerse cargo. Nunca la abandones a su suerte.
Una mascota nos aportará un millón de cosas positivas. Por eso, ¡tú siempre debes corresponderle siendo un propietario responsable!
