Aunque durante todo el año nuestras mascotas pueden tener la mala pata de sufrir accidentes o caer enfermas, en verano son más propensas a tener ciertos problemas que requieren asistencia médica. Te contamos cuáles suelen ser los motivos de urgencias veterinarias más frecuentes durante los meses estivales.
Urgencias veterinarias en verano
En verano nos encanta pasear con nuestras mascotas cuando el sol no aprieta demasiado. También nos encanta llevarlos a la playa, al campo… sin embargo, aunque pasar tiempo con nuestros peludos es maravilloso tanto para ellos como para nosotros, es más común que puedan sufrir accidentes, intoxicaciones, etc. que quedándose en casa.
Entre los problemas de salud que suelen afectar a nuestras mascotas en verano y que requieren atención veterinaria, se encuentran:
Los golpes de calor
Ya os hemos hablado de los temidos golpes de calor. Estos son uno de los principales causantes de urgencias veterinarias en vacaciones.
Si notas que a tu perro le cuesta respirar, no para de jadear, casi no se mantiene y ha estado expuesto al sol, puede estar sufriendo un golpe de calor. ¡Actúa con rapidez! Lo primero, llévale a un lugar ventilado y refresca a tu perro con agua no muy fría. Luego acude inmediatamente al veterinario.
Recuerda, además, que hay razas de perros más propensas a sufrir un golpe de calor que otras. ¡Muy atento si tu perrete es uno de ellos!
Picaduras de insectos
Los expertos señalan las picaduras de bichos como otro de los motivos que generan urgencias veterinarias en verano porque pasamos mucho tiempo al aire libre.
Según qué tipo de insecto sea el que pique a tu perro, esto puede ser de mayor o menor gravedad, pero no descuides a tu mascota por pensar que es solo una pequeña picadura: puede estar sufriendo un gran dolor.
Intoxicaciones
Una correcta alimentación es la base de la buena salud de tu mascota. Por eso, ¡mucho cuidado con lo que le das de comer a tu perro este verano!
Hay alimentos que están totalmente prohibidos para ellos y que son altamente tóxicos para su organismo.
Está muy bien que lleves a tu peludito a las comidas familiares y a las barbacoas, pero que no se te ocurra darle de comer nada de lo que tú te llevas a la boca. Podría acabar en el veterinario con una intoxicación.
Ahogamientos
No, no todos los perros son buenos nadadores. Puede ser que a tu perro le guste tirarse al agua a coger su pelota, pero siempre puede suceder que una ola inesperada lo asuste o que alguien salte muy cerca de él en la piscina sin esperarlo.
Tu perro puede perder la concentración, ponerse nervioso y acabar tragando mucha agua o ahogado. ¡Mucho cuidado con estos baños!
Lo mejor es que tu peludo siempre vaya al agua de forma segura y, para eso, los chalecos salvavidas para perros son un opción maravillosa.
Eczemas
Otro de los motivos más comunes de urgencias veterinarias en verano.
Estos vienen provocados por las alergias que empiezan en primavera y continúan en verano, pero también por la picadura de las pulgas.
Los eczemas suelen aparecer en la base del rabo y producen un gran picor en el perro, hasta el punto de la desesperación. También son muy comunes en el cuello y la cadera, pero pueden darse en cualquier zona del cuerpo.
Si notas que tu perro se rasca continuamente y la zona está inflamada o infectada, acude al veterinario rápidamente para ponerle un tratamiento.
Traumatismos
Las caídas entre las rocas de la playa o en el monte aumentan en verano.
Ten mucho cuidado si vas a pasear con tu perro por zonas peligrosas, pues una mala pisada puede ser fatal para él.
Quemaduras solares
Al igual que nosotros nos podemos quemar la piel con el sol, a ellos también les pasa y es un motivo de urgencia veterinaria.
Para algunos perros no es recomendable cortar el pelo en verano, ya que su piel se puede ver muy perjudicada.
Sus orejitas, su nariz y la parte inferior de su cuerpo suelen ser las zonas más afectadas, ya que no tienen pelo que las proteja. Para ello, podemos aplicarles protector solar para perros y protegerlos de las quemaduras.
Pero la exposición al sol no solo les afecta con quemaduras, ya que pueden acabar con un golpe de calor.
Así que cuando estés con tu perro en verano fuera de casa, vigila que siempre tenga una zona de sombra en la que tumbarse.
Además, si sacas a tu perro de paseo cuando aún hace mucho calor, puede quemarse las almohadillas con el asfalto. Prueba a tocarlo con la mano antes de sacar a tu mascota.
Frente a todos estos problemas inesperados que pueden sufrir nuestros perros en verano, nunca está de más tener contratado un seguro veterinario que nos cubra ante ellos.
Por ejemplo, con la modalidad completa del seguro para mascotas SegurCaixa de Adeslas tendrás asistencia veterinaria las 24 horas del día y consultas sin límites.
¡Toda una tranquilidad frente a estos imprevistos veraniegos que pueden padecer nuestros amigos peludos!