Cuidar la alimentación de tu mascota es esencial para que esta crezca sana, fuerte y feliz. Sin embargo, por diversas circunstancias, al animal le pueden faltar ganas de comer y entonces te tocará estimular el apetito de tu perro.
Por qué puede perder el apetito tu perro
Las razones por las que un perro puede perder el apetito son muchas. Entre ellas, las más comunes son:
- El perro puede estar enfermo.
- El animal ha comido toda su vida el mismo alimento y se ha aburrido del mismo.
- Has cambiado su alimentación. Por ejemplo, has pasado de darle comida casera al pienso comercial o, simplemente, has cambiado su pienso y el nuevo es menos sabroso.
- Tu mascota tiene problemas bucales que le causan dolor al comer.
Cómo estimular el apetito del perro
Dependiendo de la causa que haya motivado la pérdida de apetito en tu can, podrás poner en práctica unas soluciones u otras. Aquí tienes algunas ideas.
Alterna comida húmeda con comida seca
Una de las maneras de estimular el apetito de un perro es no ofrecerle el mismo alimento siempre.
Por ello, puedes consultar con tu veterinario de confianza para establecer qué cantidades son las adecuadas y alternar entre comida húmeda y comida seca sin exceder su ración diaria.
Calienta un poco su comida
Hay perros, especialmente los más ancianos, que sufren dolores dentales y a los que comer alimentos fríos no les viene nada bien. Por ello, pierden el apetito.
Debido a esto, si le estás dando comida húmeda que debes conservar en nevera una vez abierta, sácala de la misma antes de servirla para que coja temperatura ambiente o caliéntala un poco.
Esto también hará que sus aromas aumenten y sea más atractiva al olfato.
No dejes el plato lleno a su alcance
Otra de las formas que hay para estimular el apetito de un perro es no dejar siempre el plato lleno a su alcance.
Si el perro no come o come muy poco cuando se lo sirves, retíraselo. De esta manera, su hambre se incrementará para que cuando vuelvas a ponérselo delante quiera comerlo del todo.
Usa dispensadores de comida
Hay juguetes que, además de entretenimiento, sirven para estimular el apetito del perro.
Al realizar determinadas acciones con ese objeto (hacerlo girar, golpearlo, etc.) este soltará comida.
Normalmente, se utilizan para la estimulación mental del animal ofreciendo snacks, pero si tu mascota ha perdido el apetito y sabes que le gustan este tipo de elementos, úsalos para que expulse su pienso. Unos de los más útiles son los kongs.
Lava bien sus platos
Otra de las razones por la que tu perro pueda haber perdido el apetito puede no ser causa de la comida, sino del propio plato donde se la sirves.
A muchas personas se les olvida que, igual que nosotros debemos lavar nuestros platos por higiene tras emplearlos, con los de los perros se debe hacer lo mismo.
En ellos se acumula suciedad, hongos, bacterias, etc. que no solo causan malos olores en el recipiente que pueden hacer que el animal pierda el apetito, sino que este enferme.
Por ello, asegúrate de que sus platos están limpios siempre antes de servirle la comida. Eso sí, utiliza para lavarlos jabón neutro, sin olores, ya que el perfume de algunos también puede echarles para atrás.
Proporciona un ambiente tranquilo
Otra de las cuestiones que pueden hacer que a tu perro le cueste comer es que viva en un ambiente muy estresante.
Esto hará que el animal se mantenga siempre alerta y no se sienta seguro cuando se acerca a su plato.
Por ello, asegúrate de poner su comida en un lugar donde no le moleste nadie, ni personas, ni otros animales, y trata de mantener un entorno tranquilo en general.
Aunque estos trucos sirvan para estimular el apetito de tu perro, debes tener claro que si el motivo es un problema de salud, bien una enfermedad o un problema dental, el veterinario es el único que podrá determinar la causa. Por eso, si tu mascota lleva más de un día sin comer, no dudes en acudir a consulta.