Si alguna vez ha llegado a tu casa un cachorro, habrás podido comprobar lo adorables que son esos pequeños seres peludos. Y también que desprenden cierto olor particular, ¿verdad? Por eso, es normal que surja la duda de cuándo y cómo bañar a un cachorro. Es muy importante que te tomes en serio lo que dicen los expertos sobre este asunto. De no hacerlo, podrías poner en riesgo la salud de tu mascota.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
¿Cuándo se puede bañar a un cachorro por primera vez?
La realidad es que no hay una fecha consensuada entre todos los profesionales en lo que se refiere a la edad ideal para bañar a un perro por primera vez.
Sin embargo, la mayoría está de acuerdo en que lo mejor es esperar a que tu mascota haya completado su primer ciclo de vacunas. Esto es a los tres meses de edad, más o menos.
La razón es que la edad del perro minimiza los riesgos para su salud, al haber fortalecido sus defensas con el crecimiento y la vacunación. Por ejemplo, si se le baña antes de completar su primer ciclo de vacunas, se corre más riesgo de que el cachorro coja frío y contraiga moquillo.
Algunos profesionales creen que si se le seca bien, no hay problema en bañarlo antes. No obstante, como decimos, lo mejor es no arriesgarse y no bañar al cachorro antes de terminar sus vacunas.
Ten muy presente que si tu mascota enferma, las defensas de la misma se verán perjudicadas. Eso supondrá interrumpir el calendario de vacunación, con todo lo que ello conlleva. Por ejemplo, recuerda que tampoco es aconsejable sacar al perro de paseo hasta que esas vacunas estén completas, por lo que se retrasaría comenzar las salidas a la calle.
Cómo bañar a un cachorro
Hay perros a los que les gusta el agua y disfrutarán de los baños desde el primer momento. Otros, en cambio, no los disfrutan tanto, por lo que siempre habrá que intentar hacerles pasar una experiencia agradable.
Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de saber cómo bañar a un cachorro es dónde hacerlo.
Esto va a depender del tamaño del animal. Si es un perro pequeño, lo mejor es que no lo metas en la bañera, pues se puede asustar al verse en un sitio tan grande. Para él lo mejor es que emplees un barreño. Aun así, es cierto que lo más cómodo siempre será la bañera, así que puedes introducir el barreño en la misma.
Ahora, toma nota de los siguientes tips.
Tips para bañar a un cachorro
- Uses la bañera, un barreño o el propio lavamanos, lo ideal es que coloques una alfombrilla antideslizante en la superficie para que el animal no resbale. Eso perjudicaría su experiencia.
- Antes de empezar el baño, deja a mano todo lo que vayas a necesitar: cepillo de pelo de tu perro, champú, toalla, secador, juguetes…
- Previo al baño, lo ideal es que pases el cepillo por el pelaje de tu mascota. Con ello, eliminarás la suciedad superficial y si, además, es un perro de pelo largo, podrás quitar nudos y facilitar el baño.
- La temperatura del agua debe ser templada. Por eso, ten mucho cuidado de rellenar el barreño y dejar que se enfríe demasiado tiempo.
- Introduce a tu perro en la bañera o barreño junto con algunos de sus juguetes de goma. Eso puede ayudarle a entretenerse un poco.
- Si has metido al perro en la bañera, usa el rociador (alcachofa de ducha) para echarle el agua por encima. Si no, emplea un recipiente pequeño para echarle el agua por arriba o utiliza tus propias manos. Recuerda que el agua debe estar templada.
- Pon champú para perros en tus manos y echa un poco de agua. Repártelo por todo su pelo. Puedes ayudarte usando una esponja blanda.
- Deja la zona de la cabeza para el final y asegúrate de que nunca le llega jabón a los ojos, dentro de las orejas y la boca.
- Ahora, enjuaga bien todo el jabón, comprobando que lo retiras completamente.
- El primer baño no se debe prolongar más de 10 minutos.
El secado del cachorro
También ten en cuenta estos consejos a la hora de secar a tu mascota.
- Secar al perro correctamente es esencial para que no enferme. Lo ideal es que hayas acostumbrado a tu mascota al ruido del secador de pelo antes de utilizarlo con él para que no se asuste. Si no es así, entonces ponlo en marcha y déjalo sobre una superficie en cuanto cojas la toalla para que se vaya acostumbrando a su sonido.
- Ahora, coge la toalla y empieza a eliminar los restos de agua del cuerpo de tu perro, frotando con mucha suavidad.
- Una vez hayas retirado lo máximo de agua con la toalla, coge el secador y, manteniendo una distancia de 30 cm de su cuerpo, sécalo. Empieza siempre por la parte trasera de su cuerpo y evita dirigir el secador directamente hacia su hocico, ojos e interior de orejas.
- Tienes que asegurarte de que el perro queda completamente seco, sobre todo por detrás y por debajo de sus patitas.
- Luego, procede a peinar a tu mascota durante unos minutos mientras lo acaricias.
- Y lo más importante para finalizar: ¡dale un premio!
Ahora ya sabes cómo bañar a un cachorro y lo más esencial, cuándo hacerlo. ¡Cuida mucho a tu mascota!
