Si quieres conocer al Weimaraner o braco de Weimar, para empezar debes tener en cuenta los siguientes datos:
- Altura: 55 – 70 cm.
- Peso: 25 – 45 kg.
- Esperanza de vida: 10 – 12 años.
- Estilo de recomendado: Senderismo, vigilancia, casas, deportes.
Origen de la raza braco de Weimar
Se sabe que el perro weimaraner, o braco de Weimar, es anterior al siglo XIX, pero se desconoce su historia anterior a ese siglo.
A principios de 1800, el Gran Duque Carlos Augusto era gobernador del ducado de Sajonia-Weimar-Eisenach, territorio alemán. La caza mayor era su gran afición y tuvo la suerte de conocer a uno de los ancestros del actual perro braco de Weimar. Le impresionó tanto que decidió desarrollar él mismo una nueva raza de perros que fuera muy versátil y fuerte, que se utilizarían exclusivamente para la caza y sólo estaría al alcance de nobles y aristócratas.
A finales de siglo, se creó el Club Alemán del Weimaraner. La cría de estos perros era muy exclusiva y sólo se vendían a miembros del club. Con el paso del tiempo, la caza mayor empezó a verse eclipsada por la caza de animales más pequeños, por lo que este perro, el braco de Weimar, perdió popularidad como perro cazador y se convirtió en perro de muestra.
La raza braco de Weimar no salió de su Alemania natal hasta mediados del siglo XX, cuando por fin se llevaron algunos ejemplares de este perro a Estados Unidos. Posteriormente, empezó a extenderse por todo el mundo y consiguió ser una raza medianamente conocida.
A día de hoy, el weimaraner o perro de Weimar se sigue utilizando, esta vez como perro de búsqueda y rescate. También es un muy digno participante de deportes caninos y exposiciones. Además, es muy apreciado por muchos como mascota.
Características físicas del perro braco de Weimar
El braco de Weimar es un perro de esbelta y bella figura y tamaño grande. Existen bracos de Weimar de pelo largo y corto, siendo este último el más popular. Es un perro muy atlético y musculoso, como todos o casi todos los canes con pasado cazador. Tiene la espalda larga y lago inclinada y un pecho profundo.
Su cabeza está muy bien proporcionada con el resto del cuerpo, siendo algo más ancha en los machos que en las hembras. Suelen presentar una hendidura en el centro de la frente. La trufa de los perros braco de Weimar es algo especial, suele ser de color carne y se vuelve gradualmente grisácea según se acerca a la base. Los ojos también son particulares: los cachorros de Weimaraner o braco de Weimar son azules, pero los cambian a ámbar o castaños según llegan a su etapa adulta. Mola, ¿verdad? Sus orejas son colgantes, anchas y grandes.
El perro braco de Weimar tiene una cola fuerte y algo baja. Suele llevarla horizontal cuando está activo y colgando cuando está en reposo. Tradicionalmente se amputaba, pero por suerte esta cruel práctica es cada vez menos común y legal en menos lugares. El FCI hoy exige la cola completa como estándar de la raza.
Los perros de raza braco de Weimar pueden tener, como decíamos, pelo largo o corto. En la variedad de pelo largo, la capa externa es suave y puede o no haber capa interna; los weimaraner de pelo corto tienen la capa externa muy fuerte, apretada y pegada al cuerpo. No tienen lanilla interna. Los colores pueden aparecer en ambas variedades por igual y pueden ser gris plateado, gris ciervo, gris ratón, o cualquier tonalidad de gris intermedia.
Carácter del perro braco de Weimar
(Foto via: pinterest)
El weimaraner o braco de Weimar es un perro muy curioso, dinámico y activo, además de leal e inteligente. Tiene un gran instinto cazador.
Estos perros son algo desconfiados con extraños y les cuesta ser sociables. Por ello, es importante socializarlos desde cachorros para evitar que puedan desarrollar miedo a relacionarse con personas y otros perros, o incluso ser agresivo con ellos.
Con su familia la cosa cambia, los perros de Weimar son muy cariñosos, dulces, juguetones y fieles. Van con sus dueños a todas partes y sufren mucho la separación prolongada de estos. Debido a su natural desconfianza hacia personas extrañas, los perros de Weimar son excelentes guardianes.
El adiestramiento del perro braco de Weimar no es el más fácil del mundo, pero tampoco complicado en exceso. Su curiosidad e instinto cazador hacen que se distraiga fácilmente, pero la verdad es que si consigues mantener su atención, verás que aprenden muy deprisa. El adiestramiento en positivo, especialmente con clicker, da muy buenos resultados con la raza braco de Weimar.
Cuidados del perro braco de Weimar
El pelaje del perro de Weimar no requiere atenciones muy especiales en ninguna de sus dos variedades, basta con cepillar regularmente para eliminar suciedad y pelo muerto. El baño lo haremos sólo cuando esté realmente sucio.
Lo que sí es muy importante que tengas en cuenta si quieres adoptar a un perro braco de Weimar es su necesidad de realizar ejercicio, además de darle mucha compañía. Permítele correr y jugar libremente en zonas seguras para que se ejercite bien, y no dejes de lado su estimulación física y mental jugando con él. Y como decíamos, no conviene dejarle solo demasiado tiempo, pues no reacciona bien a la soledad; adora estar con su familia.
Su alta necesidad de ejercicio hacen del perro weimaraner o braco de Weimar incompatible con la vida en un piso, lo mejor es una casa con jardín o zona rural.
Iniciaremos, como decíamos, su socialización desde cachorro, así como su adiestramiento. Conviene tener a mano juguetes que le diviertan y estimulen.
Salud del weimaraner o braco de Weimar
El braco de Weimar es una raza muy saludable con escasa predisposición a las enfermedades hereditarias. Pero es algo común que los bracos de Weimar sufran de torsión gástrica; para que no ocurra, evitaremos el ejercicio justo antes y después de las comidas, así como darle raciones de alimento demasiado abundantes.
Otras dolencias frecuentes son:
Para que la salud de tu perro sea envidiable, dale pienso de calidad y llévalo al veterinario periódicamente para revisiones o si observas algún síntoma extraño. Además, nunca olvides los tratamientos antiparasitarios y las vacunas.