La otitis en perros es bastante frecuente. Se conoce como otitis externa a la inflamación aguda, a veces crónica, que afecta al pabellón auricular, al canal auditivo externo y al tímpano. Es una de las muchas enfermedades que tenemos en común los perros y los humanos. Te contamos todos los detalles.
Causas de la otitis en perros
La inflamación de los conductos auditivos produce un dolor que a veces puede llegar a ser muy molesto o incluso insoportable para los perros.
Pero ¿por qué ocurre la otitis? Las causas más comunes de la otitis en perros son:
- Parásitos: los hay de varias especies, pero el que más a menudo provoca otitis es un ácaro llamado otodectes cynotis, que habitualmente vive en el organismo de perros y gatos.
- Hongos.
- Alergias.
- Introducción de cuerpos extraños en el oído.
- Trastornos de la queratinización.
- Problemas del sistema endocrino.
- Desórdenes glandulares.
- Enfermedades autoinmunes.
- Infecciones víricas.
- Neoplasias.
A veces, se acumulan gérmenes y otros organismos dentro de los oídos del perro y agravan la situación. Por ejemplo, las levaduras y las bacterias, que se asientan en el oído y se van desarrollando dentro de él.
Síntomas de la otitis en perros
Los síntomas de la otitis en perros son muy similares a cuando nos pasa a los humanos. Recuerda que para detectar problemas de salud en tu perro, otitis o cualquier otro, debes observar bien su comportamiento. Generalmente, cuando un perro tiene otitis, estos son los síntomas que suele mostrar:
- Se comporta de forma extraña.
- Se frota la cabeza contra muebles, sofás, cojines, su cama…
- Se rasca las orejas de forma compulsiva.
- Se queja si se le tocan o acarician las orejas.
- Sacude mucho la cabeza, o la inclina, como si quisiera sacar algo que tuviera metido.
- Sus oídos segregan una sustancia extraña, que puede variar en color (desde amarillento hasta negruzco) y puede tener mal olor.
- Se muestra agresivo, apático o extremadamente sensible.
Por supuesto, no todos los perros con otitis tienen por qué mostrar todos los síntomas, dependerá de cada uno, de la gravedad del problema, de su resistencia al dolor…
Puede afectar a un oído o a los dos y suele ser muy molesta para el perro. Cuando se agrava y la infección llega al oído medio es mucho más dolorosa y difícil de tratar
Diagnóstico de la otitis canina
Es muy importante detectar pronto la causa de la otitis: dependiendo de si es un síntoma de una enfermedad o si se trata de una infección por hongos, bacterias o levaduras, el tratamiento será diferente. Por eso es esencial diagnosticarlo correctamente, para suministrar el tratamiento adecuado.
Tratamiento de la otitis en perros
Si la otitis la ha provocado un objeto extraño que se ha introducido en el oído, lo primero es extraerlo y después tratar la otitis. Además, se limpiará bien el oído para que el tratamiento pueda penetrar bien y entrar en contacto con la zona afectada.
En caso de infección, el tratamiento de la otitis en perros se practica en función del patógeno: antibiótico, antifúngico o acaricida. Generalmente el tratamiento por vía tópica se apoya con medicamentos orales. De este modo, se favorece que la otitis en perros desaparezca lo antes posible.
¿Se puede prevenir la otitis en perros?
Generalmente, cuando la otitis es un síntoma de una enfermedad, no lo podremos evitar. Pero sí puedes prevenir el resto de causas manteniendo una buena higiene en los oídos de tu perro:
- Límpialos frecuentemente con cuidado.
- Arranca los pelos que crezcan dentro, favorecen la acumulación de suciedad. ¡Tranquilo! A tu perro no le dolerá.
- Evita las agresiones: revisa sus oídos tras los paseos, sobre todo si ha sido por el campo, protege sus oídos con algodones cuando vaya a nadar o bañarse, procura eliminar toda la humedad…
Si observas cualquier señal que sugiera que tu perro podría estar sufriendo otitis, ¡acude cuanto antes al veterinario! Además de ser doloroso, ¡podría ser peligroso! Recuerda que por medio de los oídos no sólo oímos, sino que además juegan un papel fundamental en el sentido del equilibrio. Tener malestar en los oídos podría dificultarle muchísimo la vida a tu perro.