Nuestro perro puede verse afectado por muchos factores externos, y es que la falta de preparación, poca atención, imprudencias e incluso malas prácticas, ¡pueden hacer que la salud de tu amigo, se vea perjudicada!
Si estás pensando en adoptar a tu mascota, ten en cuenta que la elección del veterinario, ¡es muy importante! Aparte de ti, será la persona encargada de cuidar de la salud de tu perro.
Al igual que cuando nosotros mismos vamos al médico, ¡hay veces que nos sentimos insatisfechos con la atención veterinaria! Y es que los veterinarios pueden cometer errores bien por desconocimiento e incluso por inexperiencia.
Si tienes contacto con alguna asociación animalista, casa de acogida o protectora de animales, santuarios… Sabrás que reciben muchísimas denuncias sobre malas prácticas veterinarias.
Malas prácticas veterinarias, ¿qué es eso?
Al igual que la atención médica humana, los veterinarios, ¡nunca pretenden hacer daño de forma intencionada! Sino que intentan siempre ofrecer la mejor atención adecuada a las necesidades de cada caso.
Para que no haya confusiones, en Wakyma queremos contarte las malas prácticas que podría tener un veterinario:
- Comunicación insuficiente con los dueños del animal. La información que debe proporcionarte tu veterinario, tiene que incluir: Diagnóstico, pronóstico, posibles complicaciones, riesgos (en el caso de que los pueda tener), efectos secundarios de la medicación e incluso de la intervención, medicamentos que va a necesitar, alternativas, tratamiento completo, e incluso una vez el tratamiento o intervención se haya realizado, ¡seguimiento de la evolución de nuestro perro!
- ¿El tratamiento que ha aplicado el veterinario no funciona? En ese caso, el profesional deberá realizar un nuevo diagnóstico, para comenzar un nuevo tratamiento.
- Otra mala práctica es realizar intervenciones tanto quirúrgicas como clínicas, por profesionales no especializados en esa dolencia, ¿Necesita un tratamiento dermatológico? ¡Consulta a un veterinario especializado en dermatología! Esto es aplicable a todas las patologías.
- Antes de realizar una intervención quirúrgica, ¡realizar un examen clínico completo! Si es posible ¡realizar también pruebas de laboratorio! También es muy aconsejable realizar exámenes pre-quirúrgicos. Con todo esto, ¡evitaremos riesgos durante la intervención!
- Un error que se suele dar de una forma bastante frecuente, es el de no generar la historia clínica de nuestra mascota (registros de anestesia, análisis de resultados, evolución clínica…)
¿Qué podemos hacer ante una mala práctica veterinaria?
La mayor parte de las veces, las malas prácticas solo se denuncian cuando ocurre realmente grave (en caso de fallecimiento, o si nuestra mascota sufre efectos colaterales graves).
Lo primero que debes pedir a tu clínica veterinaria, es la copia del historial clínico de tu mascota, y también los pasos que se han llevado a cabo.
Otro de los aspectos a analizar, es si la actividad por la que se ha sufrido una mala práctica es “medico veterinaria” o pertenece a la parte de “peluquería y estética”, y es que la parte de peluquería y estética, no suelen englobarse como “medicina veterinaria”.
Ten en cuenta que si quieres denunciar, deberás presentar pruebas de la mala práctica veterinaria.
Una vez tengas todo esto, ¡podrás poner la denuncia o queja correspondiente! Una vez comprueben la falta, podrán imponer una sanción que puede ir desde la amonestación verbal o escrita hasta la suspensión del ejercicio profesional durante “X” tiempo, también podrían imponer una indemnización al dueño del animal en función de la gravedad de lo ocurrido.
Las malas prácticas veterinarias, ¿ocurren de forma frecuente?
La mayor parte de las veces, las denuncias de estos casos se desestiman debido a que el propietario del animal no lo puede probar, o también debido a que se orientan de forma exclusiva a la atención recibida. No obstante en ambos casos suele ser frecuente la falta de documentación.
La mayor parte de las sanciones, son por imprudencias, negligencias o inexperiencias quirúrgicas, que se pueden producir antes, durante y después de la propia intervención. ¿Cuáles son las intervenciones que provocan más quejas en este sentido? Las intervenciones de esterilización y de ortopedia.
Consejos a seguir ante una mala práctica veterinaria
¿Crees que has sufrido una negligencia veterinaria? ¡Ten en cuenta estos aspectos!
- La clínica veterinaria, tiene que tener espacio e instalaciones adecuadas y adaptadas a la atención de tu mascota.
- El médico veterinario, debe estar acreditado y contar con licencias.
- Tanto del médico especialista como los auxiliares, deben proporcionarte toda la información del tratamiento, consecuencias y cuidados que tu mascota va a necesitar, para mantenerte lo más informado posible.
Y tú, ¿crees haber sufrido una mala práctica veterinaria en alguna ocasión?