Dentro de las posibles patologías que puede padecer un conejo, las que tienen origen o afectan de manera secundaria al aparato digestivo son las más comunes. Esto se debe a las características peculiares del animal, así como su alta capacidad para aprovechar las energías de las dietas ricas en fibra que consume. Hoy os hablamos concretamente del íleo paralítico en conejos.
¿Qué es el íleo paralítico en conejos?
Conocido también como estasis gastrointestinal, es una de las patologías más frecuentes en los conejos que acuden a consulta.
Se trata de una enfermedad digestiva propia de estos animales que consiste en la disminución del peristaltismo del intestino. Eso significa que los movimientos intestinales se paralizan.
El íleo paralítico debe ser considerado como una urgencia médica a tratar en el centro veterinario, con un tratamiento inmediato, si se quiere aumentar las posibilidades de que el animal sobreviva.
Causas de la estasis gastrointestinal o íleo paralítico
Los causantes que pueden desembocar este problema pueden ser muchos.
- La ingesta de agentes tóxicos.
- Adhesiones posquirúrgicas.
- Estrés ambiental, derivado de cambios en su entorno, presencia de depredadores o de un conejo dominante.
- Desequilibrios en la dieta con elevadas concentraciones de carbohidratos si se compara con el contenido de fibra.
- Falta de ejercicio.
- Retardo del vaciado gástrico, acaecido por presentar cuerpos extraños en el intestino, inflamaciones o masas, tricobezoares. También por presentar contenido gástrico deshidratado a consecuencia de una deshidratación severa del conejo.
- Dolor.
Síntomas del íleo paralítico
Cuando se da el íleo paralítico en conejos, los síntomas que puede manifestar el animal son varios.
- Disminución de la secreción de heces.
- Pérdida de apetito.
- Dolor ante la palpación abdominal.
- Respiración fuerte.
- Le cuesta caminar.
- Decaimiento.
- Bruxismo o rechinar de dientes para expresar dolor.
El diagnóstico de la estasis gastrointestinal
Ante los síntomas es esencial acudir de inmediato a un centro veterinario. Allí, el profesional te pedirá información sobre algunos detalles de tu mascota para la realización de la anamnesis:
- Cómo es su dieta.
- Si hay o no más animales en casa.
- Cómo es la jaula del conejo.
- Presencia de muda o no.
- Cambios en el entorno reciente que pueden desencadenar estrés.
Recopilar todos los datos de la historia clínica del paciente es fundamental como primer paso para el diagnóstico. Tras esto se llevarán a cabo el siguiente paso, que es la exploración física del animal.
Exploración física del conejo con estasis gastrointestinal
Para llevar a cabo la exploración, suelen utilizarse la radiología y la ecografía.
Con dos radiografías, una lateral y otra ventrodorsal se podrá confirmar la presencia de la estasis intestinal.
Sin embargo, a veces ese mecanismo no es suficiente para diferenciar entre una estasis de origen obstructivo de una que no lo es.
Por su parte, la ecografía es útil en casos más complicados en los que no aparezcan alteraciones radiológicas, ya que los ultrasonidos pueden dar información muy útil.
Además de las dos técnicas mencionadas, la laparotomía exploratoria es otro método para lograr un diagnóstico definitivo. Sin embargo, en conejos que son inestables metabólicamente es una técnica de alto riesgo.
Tratamiento del íleo paralítico en conejos
Diagnosticada la patología en tu mascota, se procederá al establecimiento de un tratamiento adecuado. Este consistirá en varios métodos.
- Fluidoterapia. Su misión es rehidratar al animal y su contenido gástrico. Se realizará por vía intravenosa, subcutánea y oral. Si fuese necesario, también se podría colocar una sonda nasogástrica.
- Protectores gástricos. Muy necesarios ya que esta patología suele provocar la aparición de úlceras gástricas.
- Antibióticos con el fin de prevenir la aparición de sobrecrecimientos de origen bacteriano, secundarios al cuadro de íleo paralítico.
- Opioides para el control del dolor o antiinflamatorios no esteroideos una vez el animal se encuentre de nuevo correctamente hidratado.
- Se pueden usar fármacos para que se estimule la motilidad gastrointestinal cuando la razón de la patología no sea un cuadro obstructivo.
- Uso de malta para gatos como laxante para eliminar las bolas de pelo.
- Si hay muchos gases en el intestino, se puede administrar simeticona por vía oral.
- También es importante estimular la motilidad gástrica mediante masajes y con ejercicio ligero.
Además de lo mencionado, se le deberá proporcionar al conejo un soporte nutricional si se encuentra en estado crítico, a través de alimentación forzada. Para ello, se le aportará 15 ml/kg cada 8 horas de un preparado para herbívoros, a través de una jeringuilla de 1 ml o con una sonda nasogástrica.
En caso de que el tratamiento veterinario no dé resultados, la última posibilidad es realizar una gastrotomía. Eso empeora bastante el pronóstico, sobre todo debido a las endotoxemias que provocan las bacterias del género Clostridium y que suelen darse en el tracto gastrointestinal de muchos herbívoros.
Tras la operación, se procurará reinstaurar la microflora y la motilidad gastrointestinal.
Cómo evitar el íleo paralítico en conejos
Para saber cómo evitar el problema, debemos recurrir de nuevo a analizar las causas, pues evitando los causantes se podrá prevenir la aparición de esta patología. En general:
- Lo primordial debe ser proporcionarle una dieta correcta, muy rica en fibra. De ahí que el heno sea fundamental y esté presente en un 80% de su comida diaria.
- Además, debe tener siempre a su disposición agua para que pueda mantenerse hidratado.
- Se le debe proporcionar al animal un ambiente tranquilo para vivir, lejos de otros animales, ruidos y con una temperatura agradable. También se le debe garantizar una estabilidad en su rutina y no cambiarlo de entorno a no ser que sea absolutamente necesario.
- Hay que eliminar del alcance del animal los cuerpos extraños y tóxicos que pueda ingerir.
- Se debe sacar al conejo de su jaula todos los días para que pueda hacer ejercicio.
- Las visitas periódicas al veterinario ayudarán a conocer el estado de salud del animal, lo cual puede favorecer la detección temprana de masas en el intestino u otros problemas que pudiesen causar la estasis gastrointestinal.
Si tienes un conejo como mascota, recuerda que los problemas digestivos en este animal son frecuentes y que, entre ellos, el íleo paralítico en conejos es uno de los que más los llevan a consulta. ¡Toma nota de todo lo que te hemos contado y no pierdas de vista cualquier señal!