Resistirse a la ternura de los cachorros es bastante complicado. ¡Son tan adorables! Cuando un pequeño peludo llega a nuestra vida, es difícil no querer pasar la mayor parte del tiempo con él, viendo cómo juega y curiosea con todo a su alrededor. Sin embargo, por la noche todo cambia, pues la mayoría de veces es imposible hacer que se duerman. Por ello, os vamos a dar unos cuantos consejos para hacer que un cachorro duerma toda la noche.
¿Cuánto duermen los cachorros?
A pesar de que son seres llenos de energía que parece que nunca se cansan, la realidad es que sí lo hacen y los cachorros necesitan dormir muchas horas al día. En horario diurno es muy normal verlos echándose una siesta que durará entre media hora y dos horas, casi siempre después de un periodo de actividad.
Durante la noche, al igual que los bebés, no suelen dormir del tirón, pero en total pueden llegar a descansar entre 6 y 10 horas. En suma, cuando un perro es cachorro, puede llegar a dormir hasta 18 horas diarias, tiempo que irá rebajándose a medida que va creciendo.
Primera noche de un cachorro en casa
Cuando más joven sea el perro, más le va a costar dormir toda la noche de un tirón. Además, el cambio de hogar y la separación de su madre y hermanos (en caso de venir de una camada), le puede causar mucho estrés.
En caso de ser posible, solicita alguna prenda con el olor de su familia perruna (manta, toalla, trapo…) para ponerla en su cama y que se sienta algo más relajado entre esos aromas familiares.
Aun así, ya te advertimos que esas primeras noches el cachorrito no va a dormir de seguido. Esto es así porque, al igual que los bebés humanos, el perro no puede controlar su vejiga y va a necesitar orinar cada cierto tiempo.
El animal no deberá comenzar sus paseos hasta que no tenga sus vacunas puestas, por lo que es importante que enseñes al cachorro a usar el empapador cuanto antes. Esto te ayudará a no ir pisando charcos cada mañana.
Mi cachorro no duerme y además llora
Es muy normal que los cachorros lloren los primeros días que están en casa. Si tras las visitas pertinentes al veterinario este te ha asegurado que su estado de salud es óptimo, los motivos por los que un cachorro llora suelen ser:
- Separación de su familia perruna: el perro se sentirá inseguro y desprotegido.
- Incomodidad: es necesario que el cachorro esté cómodo y cobijado.
- Está estresado por falta de ejercicio.
- Mala digestión: hay que tener mucho cuidado con la alimentación del cachorro.
Veamos, ahora sí, aquellos tips para intentar que el perro duerma toda la noche.
Cómo hacer que un cachorro duerma toda la noche
Estos consejos que se muestran a continuación pueden hacer que tu cachorro se sienta mucho mejor a la hora de irse a la cama por las noches y le vayan acostumbrando a dormir del tirón.
1. Mucho ejercicio durante el día
Los cachorros son una fuente de vitalidad y tanta energía no puede quedarse acumulada en un cuerpo tan pequeño. Los perros deben realizar ejercicio durante el periodo diurno, tanto físico como mental.
En lo que a ejercicio físico se refiere hay que tener mucho cuidado con la intensidad, ya que sus huesos y articulaciones aún están en desarrollo y un exceso del mismo puede ser contraproducente. Por ejemplo, en perros de razas grandes, la displasia de codo es una enfermedad muy común durante el crecimiento y mucho ejercicio podría agravar el problema.
Se debe permitir al cachorro correr y jugar mucho en casa, y comenzar a pasear en la calle tras la vacunación. Además, de esto, para estimular su mente se le deben proporcionar juguetes acordes a su edad.
2. Tranquilidad
Es imposible que el cachorro quiera dormir por la noche si 5 minutos antes de «mandarlo» a la cama has estado jugando con él. Establece una rutina donde, al menos, 45 minutos antes de la hora de dormir, ya se acaben los juegos.
Además, evita que el cachorro esté en una sala donde haya personas hablando, la televisión puesta, luces muy intensas, etc. Cuanto más tranquilo sea el ambiente, mejor.
3. Que haga sus necesidades antes de dormir
Como mencionábamos antes, los cachorros no pueden controlar su vejiga, por lo que uno de los motivos por los que no duermen del tirón toda la noche es porque necesitan levantarse a orinar.
Es por ello que lo más adecuado es que antes de irse a dormir hayan hecho sus necesidades.
4. Prepara un lugar cómodo para él
A la hora de preparar su lugar de descanso es muy necesario que tengas en cuenta la temperatura ambiente.
No es necesario llenar la cama de mantas en plena ola de calor veraniega. En ese caso, basta con que el can tenga una cama cómoda y se pueda tumbar en el suelo si le apetece. Colocar cerca una alfombrilla refrescante también es buena opción.
Si hace frío o la temperatura es neutra, su cama sí que tiene que aportar calidez. Pon mantas en su camita de manera que se pueda acurrucar en ellas cómodamente.
5. Emula la presencia de su madre
Las primeras noches puede ser muy útil colocar una pequeña bolsa de agua caliente o botella térmica debajo del colchón de su cama para que le dé calor, al igual que lo haría el cuerpo de su madre.
Otro truco que se suele recomendar es colocar también debajo un reloj de agujas, pues sonido le recordará al latido del corazón materno y le relajará.
6. Quédate cerca
Hacer que un cachorro duerma toda la noche no es sencillo y si te decimos que durante esas noches es aconsejable que permanezcas cerca, entendemos que no te guste la idea.
Sin embargo, es la única manera de que en ese periodo de adaptación no se sientan solos. Eso sí, mucho ojo con subir al pequeñín a tu cama para que se acurruque contigo. Aunque puede ser que funcione y duerma, lo vas a acostumbrar a eso… ¡y luego a ver quién lo baja!
7. Dale juguetes para morder
Mientras le están creciendo los dientes, el pequeño peludo estará como loco intentando morderlo todo para aliviar su dolor. Que tengan cerca juguetes especiales para morder durante la noche puede hacer que, tras calmar un poco esa molestia, sigan durmiendo tranquilamente.
No será hasta aproximadamente las 16 semanas de vida que el perro comenzará a dormir toda la noche del tirón. Hasta entonces, echa mano de estos trucos… ¡y de algo de paciencia!