Exactamente igual que nos ocurre a los humanos, los felinos también pueden sufrir algunas enfermedades relacionadas con sus articulaciones. Una de las enfermedades más conocidas es la artritis en gatos, esta se caracteriza por la inflamación y el dolor muscular (entre otros muchos síntomas que te contaremos a continuación).
Cabe destacar, que aunque parece una enfermedad fácil de detectar, los felinos suelen disimular muy bien cuando tienen dolor. Si no sabes exactamente los síntomas que debes buscar, ¡es posible que ni siquiera te des cuenta si tu gato tiene artritis!
Justamente por esto, cobra una especial importancia conocer los síntomas de la artritis en gatos, su tratamiento y además los cuidados que necesitará tu felino.
La artritis felina, ¿qué es?
La artritis felina, también toma el nombre de «osteoartritis felina», y es una enfermedad que puede llegar a cualquier edad en los gatos.
Se caracteriza por la inflamación y el desgaste de las articulaciones. La artritis en gatos, provoca dolor, rigidez y pérdida de la movilidad del felino.
Otra cosa que debes saber, es que la artritis felina, es una enfermedad degenerativa, es decir, irá empeorando con los años.
Diferencias entre artrosis y artritis en gatos
La artrosis felina, suele afectar a los gatos ancianos, en cambio la artritis, puede producirse a cualquier edad.
Si un gato tiene artrosis, este irá perdiendo de forma progresiva los cartílagos. Esto provocará que los huesos se rocen y se vayan desgastando poco a poco.
En definitiva, aunque la artrosis y la artritis en gatos parezcan iguales, ¡no lo son!
Causas de la artritis en gatos
Un gato puede terminar desarrollando artritis reumatoide debido a diferentes factores:
- Debido a una lesión, golpe o traumatismo.
- A causa de una bacteria o germen que ha llegado a la articulación.
- Malformación en los miembros.
- Problemas durante su desarrollo.
- A consecuencia de su propio sistema inmunológico.
- En caso de obesidad o sobrepeso, se pueden agravar los síntomas de la artritis en gatos
Síntomas de la artritis felina
Si un gato tiene artritis felina, puedes identificarlo detectando los siguientes síntomas:
- Inflamación de las articulaciones.
- Pérdida de movilidad.
- El gato realizará menos ejercicio del habitual (este experimentará dificultad al moverse, saltar…).
- Dolor muscular.
- Crujidos en las articulaciones.
- Cambios en su comportamiento. Un gato con artritis se mostrará desganado, depresivo…
Es cierto que detectar la artritis en gatos no es nada fácil. Los gatos suelen ocultar muy bien sus dolencias. No obstante, si tu gato muestra el menor síntoma, es de vital importancia que le lleves al veterinario. Un profesional cualificado, podrá realizar a tu felino:
- Análisis de sangre.
- Radiografías.
- Diagnóstico completo.
Tratamiento de la artritis en gatos
Para realizar el mejor tratamiento a un gato con artritis, se necesitará el diagnóstico de un profesional, ¡es clave para saber la gravedad en la que se encuentra!
El tratamiento de la artritis en gatos, suele comenzar con antiinflamatorios, con el fin de aliviar y minimizar tanto el dolor como la inflamación de las articulaciones. Habitualmente, también se les suele recetar suplementos como: condrotitina o glucosamina, muy eficaces para aliviar los síntomas que experimenta el felino.
En el caso de esta enfermedad, la cirugía se contempla como última opción, siendo solamente viable en casos de una artritis felina muy desarrollada.
Si quieres prevenir la artritis en tu felino, intenta darle una alimentación adecuada para el, además de ejercitarle de forma regular. Además de esto, si tu gato tiene sobrepeso o obesidad, deberás intentar que este baje de peso, con el fin de disminuir esos kilos extra que aguantan sus articulaciones.