El sedentarismo en mascotas es algo que está en nuestra mano evitar si somos propietarios de uno o varios animales. Si te preguntas por qué hay que evitarlo, aquí te explicaremos las consecuencias negativas que conlleva que tu mascota no haga ejercicio. ¡Toma buena nota!
¿Por qué hay que evitar el sedentarismo en mascotas?
El sedentarismo en mascotas puede traer consigo diversos problemas de salud a tu animal de compañía.
Dependiendo de qué mascota tengas, estas consecuencias pueden ser más o menos graves o darse en menor o mayor medida, pero a todas acaba por afectarle.
1. El sobrepeso
Este es el principal motivo por el que hay que evitar el sedentarismo en mascotas. Cuando un animal no hace ejercicio, la tendencia será coger peso de más.
Si esto es tan grave es porque la propia obesidad trae consigo otras enfermedades y consecuencias negativas para la salud asociadas a ella. Exactamente lo mismo que pasa en los humanos.
2. Problemas en articulaciones
Una de las consecuencias derivadas del sobrepeso es el desgaste de las articulaciones.
Al tener un cuerpo con peso superior al recomendado para el tamaño del animal, sus articulaciones se verán afectadas al soportar más peso del que deberían. Esto le producirá un desgaste de las mismas. También es más común que sufran artrosis.
Del mismo modo, aunque no exista sobrepeso, el propio sedentarismo irá atrofiando las articulaciones de la mascota por falta de movimiento.
3. Dificultad en las relaciones sociales
Cuando un animal no sale de casa o de su jaula, se reducen sus posibilidades de interacción con otros animales y/o personas.
La socialización es importante en cualquier mascota y, para ello, es necesario que el animal se relacione con el entorno… y, ¿cómo se va a relacionar si está absorbido por el sedentarismo?
4. Diabetes
Una dieta desequilibrada y el sedentarismo son algunos de los factores de riesgo en la aparición de diabetes en mascotas.
Si bien es cierto que no se puede anular al 100% la posibilidad de que un animal sufra diabetes, ofrecerle una vida sana reducirá las probabilidades. Y en una vida sana no existe el sedentarismo.
5. Gases
El sedentarismo en mascotas es una de las causas que pueden provocar la aparición de gases en perros y otros animales.
El movimiento y el ejercicio ayudan a que todo funcione mejor, tanto física como mentalmente.
Así que ya lo sabes: si quieres evitar los gases en tu mascota para que ni ella ni tú (olfativamente) los sufráis, acaba con su sedentarismo.
6. Problemas en el adiestramiento
Si tienes una mascota sedentaria, puedes encontrarte con alguna que otra complicación o problemas en el adiestramiento.
La explicación es sencilla. Para poder enseñar algo a un animal y que este aprenda, debe estar motivado, pero también muy concentrado en eso que tú quieres que llame su interés.
Si tu mascota nunca hace ejercicio, el exceso de energía que no puede gastar saldrá a la luz en el momento en el que tú quieras llamar su atención con algo para entrenarle. El animal se mostrará hiperactivo, ansioso, etc. y no tendrá la capacidad de concentrarse en lo que verdaderamente nosotros queremos.
7. Problemas mentales
Como mencionábamos antes, el ejercicio libera energía, pero también tensiones y estrés.
La vida sedentaria en mascotas lo que hace es provocar el cúmulo de esos problemas, manifestándolos en comportamientos extraños como el síndrome de pica, estereotipas, como cuando un gato se persigue la cola, o en actitudes destructivas, agresivas, etc.
Algunos consejos para evitar el sedentarismo en mascotas
Ahora que ya conoces los riesgos, aquí tienes algunos consejos para evitar el sedentarismo en mascotas.
El paseo diario
Pasear a tu mascota o que esta tenga mucho espacio en casa y pueda moverse, debe formar parte de su rutina diaria.
Si se trata de un perro, hay que sacarlo a la calle unas 3 veces al día. De esta manera no solo hará sus necesidades fuera, sino que caminará, sociabilizará, se desestresará, etc.
Es importante que cuando estés fuera de casa, aproveches los espacios amplios para que el perro corra y juegue. Por ejemplo, el frisbee es una gran opción, pero hay otras muchas maneras de entretener a un perro fuera de casa.
Eso sí, recuerda que la duración de los paseos, así como la intensidad del ejercicio deberá estar adaptada a las características físicas del animal y su edad, principalmente.
En cuanto a los gatos domésticos que no tienen posibilidad de salir de casa, hay que dejarles campar a su aire por la casa.
En el caso de mascotas más pequeñas como conejos, cobayas, hurones o hámsters, hay que permitirles salir de sus jaulas varias veces al día para que corran por alguna estancia segura del hogar.
Los juegos
Aunque saques a tu mascota fuera de casa o la dejes libre en ella, es muy importante tu interacción con el animal mediante juegos.
Esto reforzará vuestro vínculo, además de acabar con el sedentarismo del animal de una manera muy entretenida.
En cuanto a los juegos, puede ser desde lo más simple para que el animal te persiga por casa, hasta juegos de inteligencia.
Los aprendizajes
¿Y por qué no aprovechar que quieres que tu mascota mueva el culete para enseñarle trucos?
Intenta enseñar a tu perro que te traiga algo o a tu cobaya que acuda a tu llamada.
Emplea premios para que el aprendizaje sea mediante refuerzo positivo y tira mano de la paciencia (porque no ocurrirá de un momento para otro), pero cuando logres tu objetivo, lo habrás hecho ayudando también a tu mascota a que no se pase el día tumbada.