Cuando bajan las temperaturas hay perros que son tan vulnerables al frío que lo pasan realmente mal. Por ello, siguiendo unos simples consejos, puedes conseguir que tu perro no pase frío y asegurarle bienestar y buena salud.
Tips para que tu perro no pase frío
Cuando evitas que tu perro pase frío le estás ayudando, en gran medida, a conservar un estado óptimo de salud.
El frío, las lluvias y los escasos cuidados en estas épocas pueden llevar a tu mascota a resfriarse y eso es algo a evitar.
Así que sin más, pasemos a ver algunos truquitos muy simples que ayudarán a que tu perro no pase frío.
1. La ropita de abrigo
Para aquellos perros pequeños o muy delgados, un abrigo se convierte en esencial cuando el frío se apodera del ambiente.
En el caso de perros grandes o aquellos que son razas que están acostumbrados a convivir en entornos frío pues provienen de ahí, no siempre es necesario.
El abrigo para perros cobra mayor importancia cuando se sale de casa para los paseos. Si luego, en tu hogar, la temperatura es adecuada, puedes quitárselo a tu mascota.
2. Elige bien cuándo salir a la calle
Que le pongas un abrigo a tu mascota no va a ayudar mucho en que el perro no pase frío si lo sacas en plena tormenta o con temperaturas heladas.
A no ser que no te queda más remedio, evita salir a la calle con el peludo cuando esté nevando, lloviendo muchísimo o haya mucho viento.
Quizás tengas que reducir el número de paseos ese día, adelantarlos o atrasarlos un poco estando pendiente del tiempo. Pero es mejor eso a que tu perro lo pase mal por el frío o enferme, ¿no?
3. En casa, mantenlo calentito
Durante el invierno, si el frío se apodera de nuestros hogares, es muy normal encender la calefacción o las estufas para crear un ambiente un poco más cálido.
Esto también lo agradecen las mascotas.
Eso sí, tanto por su bien como por el tuyo y el de las personas que habitan contigo, la temperatura a la que esté tu casa debe ser agradable, pero no excesiva. De no ser así y estar muy elevada, el contraste al salir al frío de la calle podría haceros enfermar.
Por otro lado, para evitar que tu perro pase frío, debes proporcionarle un lugar caliente donde descansar.
Durante el invierno, puedes colocar su colchón o cama sobre una superficie sólida que no sea directamente el suelo para aislarlo del frío del mismo.
También puedes colocarle una mantita cerca para que se acurruque en ella.
A veces se recomienda mover la cama y situarla un poco más cerca de los radiadores, pero esto no siempre es aconsejable.
Si lo vas a hacer, por un lado, no pegues su cama al radiador y, por otro, asegúrate de que es lo que quiere tu perro. Puede pasar que a tu mascota no le guste la nueva ubicación de su cama y opte por dormir en el suelo o subirse al sofá, siendo peor la solución que el problema.
4. Ojo con las tareas de aseo
Esto no significa que no tengamos que asear a nuestro perro en invierno.
Más bien nos referimos a que, preferiblemente, no le cortemos el pelo durante los meses más fríos. O por lo menos no excesivamente.
Puedes recortarle aquellos pelitos que ya sean un incordio para su visión o se estén metiendo en sus oídos y dejar el manto del cuerpo (repetimos, siempre que sea posible) hasta que empiecen a subir un poco las temperaturas.
¿Por qué? Pues porque en el caso de los perretes el pelo no cumple una función estética, sino más bien protectora.
Eso sí, el cepillado en estos casos toma aún más importancia de la normal si cabe por el asunto que comentaremos en el siguiente punto.
5. ¿Baño a mi perro en invierno?
Es muy probable que te preguntes si es aconsejable bañar a tu perro en invierno.
Pues bien, como decíamos antes el pelo del perro cumple una función protectora, pero también lo hace su piel. Esta segrega de manera natural unos aceites que le ayudan a protegerse del frío, pero también de patógenos externos.
Es por este motivo que los expertos desaconsejan, de manera general, bañar con excesiva frecuencia a las mascotas, ya que perderían esa protección natural. En invierno, esto es mucho más importante.
Sin embargo, eso no significa que no puedas bañar a tu perro en ningún momento mientras dure el frío. Simplemente se aconseja que se haga solo por un buen motivo (por ejemplo, si huele muy mal o se ha ensuciado muchísimo).
Eso sí, si vas a hacerlo, es mejor que tengas en cuenta una serie de consejos para bañar a tu perro en invierno, como son que lo hagas en el interior de casa, que no te entretengas demasiado o que lo seques bien inmediatamente después.
Y refiriéndonos al punto anterior, el cepillado del pelo cobra especial importancia, ya que cepillándole frecuentemente lograrás eliminar la suciedad superficial y que tu mascota esté limpia más tiempo sin pasar por la ducha.
6. Buena alimentación
Conocer las cantidades de comida recomendadas para tu perro en cada etapa de su vida es fundamental para que esté sano. No se le puede dar de más, pero tampoco de menos.
Cuando el frío llega, hay que prestar aún más atención a esto, ya que para que los perros conserven su calor corporal deben consumir la comida correcta y que esta le dé el aporte calórico necesario.
Si lo deseas, puedes consultar a tu veterinario de confianza si en el caso concreto de tu mascota debes incrementar un poco la dosis de comida durante el invierno o le puedes ofrecer unas vitaminas o complementos alimenticios.
7. Acceso a un interior
Si tu mascota es de las que siempre están en el jardín, igual que en verano se recomienda que tenga acceso a una zona cubierta que le dé sombra cuando el calor aprieta, durante el invierno, si no quieres que tu perro pase frío, debes dejarle un acceso al interior.
Al menos por las noches y cuando el frío sea más fuerte, debes dejarle pasar a un lugar resguardado de la casa.
Como ves, evitar que un perro pase frío no es para nada complicado y estarás ayudando mucho a tu peludo.
