Una de las mejores ventajas de tener un gatito como mascota es que son animales muy higiénicos en cuanto a aseo propio y, sobre todo, en cuanto a sus heces. Ofreciéndoles una caja de arena te puedes ahorrar el encontrarte regalitos por toda la casa. Normalmente son ellos mismos los que empiezan a usarla por instinto, pero en ocasiones hay que enseñarles. Si quieres saber cómo hacerlo, te contamos, paso a paso, cómo enseñar a un gato a usar el arenero.
Enseñar a un gato a usar el arenero: consejos paso a paso
1. Elige el lugar perfecto
El lugar donde decidas poner la bandeja de arena de tu gato ayuda bastante a que la use.
Debe ser un lugar alejado de su comida y de su agua, a ser posible en un lugar lo más íntimo posible y tranquilo.
2. Escoge y prepara la bandeja
Lo primero que debes hacer es escoger el cajón de arena que más cómodo le vaya a resultar a tu gato. Por ejemplo, los cajones de arena deben ser profundos para que, a la hora de esconder las heces, el gato no eche arena fuera .Sin embargo, si tu gatito es muy pequeño, no debes olvidar que tiene que acceder fácilmente a él.
De entre todos los tipos de arena para gatos que hay, lo más recomendable es que escojas una no perfumada, ya que podría confundir al gato al tapar el olor de sus heces y hacerle olvidar cuál es la función real del arenero.
Por otro lado, lo mejor es que sea arena compacta, que no levante demasiado polvo al removerla, ya que podría causar alergia en tu gato.
Rellena la bandeja de arena tal y como indique el fabricante, ya que según la profundidad que tenga deberás llenar hasta un tope.
3. Tómatelo con calma
¡Como todo en esta vida! Sí, para enseñar a un gato a usar el arenero también necesitas un poco de paciencia.
Puede pasar que a tu gatete le cueste más que a otros empezar a usarlo, así que vas a tener que ayudarle y por eso te estamos dando estos consejos.
Lo primero que puedes hacer es que, si pillas a tu gato intentando hacer sus necesidades cerca del arenero, pero no en él, lo intentes coger con suavidad y lo introduzcas en la bandeja para que deje sus heces ahí. ¡Recuerda, con calma! Si lo haces bruscamente acabará asociando el arenero con algo negativo.
4. Enséñale la bandeja y el arenero
Cuando hayas elegido un lugar para ubicar el arenero, muéstraselo a tu gato. Cuando te esté mirando, remueve la arena y escarba en ella con tus dedos, para que vea lo que se puede hacer ahí. Si te copia, se le quedará grabado que es el sitio perfecto para esconder sus heces, algo que ya hacen por instinto para evitar atraer a depredadores con el olor.
5. Mueve el arenero a un lugar mejor
Aunque la ubicación del arenero debería ser definitiva, si estás empezando a enseñarle y tu gato siempre va a defecar y orinar a un mismo lugar, podrías considerar que esa es mejor ubicación para la bandeja (siempre que sea posible).
Puedes moverla hasta ahí y comprobar si comienza a usar el cajón de arena. Quizás ese sitio le da más intimidad a tu gatete que donde la habías puesto previamente y por eso prefiere hacerlo ahí.
6. Refuerzo positivo SIEMPRE como método de aprendizaje
El refuerzo positivo consiste en enseñar a base de premios. Si tu gato no usaba el arenero y ahora está aprendiendo, no está de más que lo premies cada vez que lo haga bien hasta que se acostumbre del todo.
Más consejos para enseñar a un gato a usar el arenero
- Debes retirar la caquita de tu gato todos los días del cajón de arena. Además, una vez a la semana debes cambiarla y limpiar la bandeja. Para limpiarla, retira toda la arena y usa agua caliente y un detergente, pero no productos de fuertes olores, ya que pueden ser tóxicos para él. Que su bandeja esté muy sucia es muy desagradable para ellos y podría impedir que la usen.
- Si tienes dos gatos en casa, lo recomendable es que cada uno tenga su bandeja de arena. Ya sabes que son animales muy territoriales y esto puede causar grandes conflictos. Uno de ellos es que se peleen por el uso del arenero y que acaben por dejar de usarlo. Un arenero por gato es uno de los consejos imprescindibles a seguir para hacer que dos gatos se lleven bien.
- Si tu gato siempre ha usado el arenero y, de repente, deja de usarlo, es que algo no va bien. Se puede tratar de estrés felino, celos o de alguna enfermedad. Presta atención al estado de tu gato y observa si tiene algún síntoma evidente de malestar, como dejar de comer u otros cambios de comportamiento y consúltalo con tu veterinario de confianza.
¡Ahora ya sabes cómo enseñar a un gato a usar el arenero!
Foto de portada vía 4 Mejores