Los animales ya han demostrado en diferentes ocasiones ser una excelente terapia contra montones de problemas de salud, desde tratamientos psicológicos hasta detección de tumores. ¿Sabías que también son una terapia maravillosa contra el Trastorno del Espectro Autista? Los más empleados para estas actividades son los perros, ¡pero otros animales han demostrado también ayudar a los pacientes a muchos niveles!
Animales como terapia para el Trastorno del Espectro Autista
Diversas investigaciones han demostrado ya que las personas con autismo salen realmente beneficiadas de terapias con animales, especialmente con perros y caballos. ¡Pero hay otros animales que también aportan mucho a estas personas! ¿Qué bien hace cada uno de ellos? ¡Vamos a verlo!
Perros
Las personas que siguen una terapia para el Trastorno del Espectro Autista a menudo se ven involucradas en actividades con perros. Estos animales son fáciles de adiestrar, por lo que un perro de carácter equilibrado y cariñoso es ideal para una persona con autismo. Relacionándose con perros consiguen dejar de ser personas dependientes para acabar siendo los mejores amigos y enseñando montones de juegos y trucos a estos fieles peludos.
Además, los perros dan mucho cariño y hacen mucha compañía, por lo que tener uno como mascota, aunque no sea de los especialmente adiestrados para tratar el autismo, es realmente recomendable para estos pacientes. Los perros que más se suelen utilizar para estas terapias son el labrador y golden retriever, así como el pastor alemán, ¡tres de las razas más inteligentes!
Caballos
Se sabe que los caballos ayudan en gran medida a personas con problemas de equilibrio y movilidad, pero la verdad es que también pueden tener un gran peso emocional, por lo que afectan a la comunicación y el comportamiento de las personas.
Los caballos son animales realmente inteligentes y son capaces de comprender al ser humano y comunicarse con él, por lo que el vínculo que llega a crearse es muy fuerte. Entablar esta relación con este tipo de animales ayuda a las personas con autismo, especialmente a los niños, a desarrollar una empatía y sensibilidad enormes, así como favorecer su capacidad de comunicación y de adaptación a diferentes situaciones.
Delfines
Estudios han concluido que interaccionar con delfines ayuda a desarrollar la comunicación y favorece la concentración. Además, se trata de animales realmente sensibles y divertidos, muy aptos para la relación con seres humanos. Es por esto que se llevan utilizando muchos años para este tipo de terapias, tanto en Estados Unidos como en Europa.
¡Es muy importante que se siga invirtiendo en investigación para el tratamiento del Trastorno del Espectro Autista y otros problemas de salud! Una vez más, los animales nos han demostrado su sensibilidad, amor y dedicación incondicional.