Si alguna vez tu perro se pone enfermo, igual que nos ocurre a nosotros, es mejor que no siga su dieta habitual durante esos días delicados. Elegir la mejor dieta blanda para perros es muy importante para que se recuperen completamente y vuelvan a tener su ritmo digestivo normal.
¿Quieres saber cuál es la mejor dieta blanda para perros? Todo lo que necesitas está en este artículo, ¡no te lo pierdas!
Por qué elegir una dieta blanda para perros
La dieta que te vamos a recomendar en las próximas líneas está especialmente pensada para perros con problemas pasajeros de vómitos o diarreas, es decir, perros enfermos del aparato digestivo. Lo primero, por supuesto, será acudir al veterinario al observar los primeros síntomas para que pueda realizar un diagnóstico acertado.
Recuerda que siempre debes seguir las indicaciones de tu veterinario, no mediques ni hagas cambios drásticos en la alimentación de tu perro por tu cuenta. Cuando el veterinario te indique que puede volver a comer, su ritmo de ingesta será diferente hasta haberse recuperado por completo, y también serán diferentes los ingredientes de su dieta.
Empecemos por las cantidades… ¿Cuánto debe comer mi mascota?
El tamaño de las raciones de nuestros animales suele ser una duda para muchas personas. Nosotros no podemos saber cuándo tienen o dejan de tener hambre, ya que no nos lo pueden decir. De hecho, muchos perros nunca llegan a saciarse, de modo que comen todo lo que les demos aunque no lo necesiten, desarrollando obesidad. Por eso es muy importante saber controlar la cantidad diaria adecuada de alimento para nuestros perros.
El veterinario sabrá indicarte qué cantidad diaria de alimento le corresponde a tu perro y en cuántas tomas diarias, en función de factores como su edad, peso y actividad física. Otro indicador que te puede orientar son las tablas de racionamiento que incluyen los sacos de pienso. La cantidad de alimento que ingiere un perro enfermo o convaleciente es igual o muy similar a la que consume cuando está sano, la diferencia estará en los componentes.
Las proporciones adecuadas de alimento son:
- 75 – 80% carne o pescado (sin huesos ni espinas).
- 20 – 25% vegetales.
Carne y pescado en la dieta blanda para perros
A la hora de elaborar una dieta blanda para perros, busca carnes y pescados bajos en grasa para facilitar la digestión. Te recomendamos que la carne se la des cruda, ya que cocinada es algo más complicada de digerir para ellos; eso sí, tienes que haberla congelado antes para eliminar posibles bacterias. El pescado debe ser cocinado, a la plancha o al horno. Procura no dar a tu perro carne o pescado hervidos, ya que con este tipo de cocción desarrollan unas toxinas perjudiciales para su salud.
Las carnes y pescados más recomendables para las dietas blandas para perros son las carnes blancas como pollo, pavo o conejo y los pescados blancos, como por ejemplo la merluza. El cerdo, la ternera y los pescados azules es mejor evitarlos.
El papel de los vegetales en la dieta blanda para perros
¡Los perros no pueden comer cualquier fruta o verdura! No todas les sientan bien; de hecho algunas, como por ejemplo las uvas, son tóxicas para ellos. Las frutas y verduras que elijas para la dieta blanda para perros deben ser de fácil digestión y ayudar a asentar el estómago.
Lo mejor es darlas cocidas y bien trituradas, para que sean más fáciles de digerir pero conserven todos los nutrientes.
¿No sabes qué frutas y verduras son apropiadas? Por ejemplo, la yuca, la manzana (desecha el corazón, las pepitas tienen cianuro y son venenosas para los perros), zanahoria, calabaza… Evita por ejemplo la patata, el almidón no es fácil de digerir cuando el organismo no está en buenas condiciones.
Por supuesto, todos los ejemplos de comida que te damos son orientativos, ¡cada perro es un mundo! Observa bien cómo reacciona a los alimentos que le das y ve adaptando la dieta blanda para perros según lo necesite.
Descubre los alimentos que son dañinos e incluso tóxicos para tu perro.
Cómo distribuir las tomas en la dieta blanda para perros
La cantidad de las tomas es un aspecto muy importante a tener en cuenta a la hora de elaborar una buena dieta blanda para perros. Lo mejor es hacer varias pequeñas tomas a lo largo del día en lugar de darse un atracón. El organismo necesita irse acostumbrando nuevamente a digerir alimentos con normalidad y hay que ir poco a poco.
Si distribuyes su comida en 4 o 5 pequeñas tomas al día, su sistema digestivo tendrá tiempo suficiente para irlo gestionando, trabajando despacio y sin verse sobrecargado. Con esta dieta blanda para perros deberías observar que mejora en dos o tres días; en caso de no ser así, lo mejor es volver al veterinario y contarle el proceso que has seguido.
¡Ojo! Cosas que debes tener en cuenta:
- Conoce bien a tu perro y actúa siempre en consecuencia. Por ejemplo, si sabes que es sensible, prueba a triturar su comida y dársela en forma de pure o pasta fina, seguramente le cueste menos digerirla.
- Esta es una fase diferente de alimentación, así que no te sorprendas si su ritmo intestinal también varía. Con este tipo de dieta, puede que haga sus necesidades de forma diferente, bien en menos cantidad de lo normal o un poquito menos a menudo. Su flora se está recuperando, es normal que sufra alteraciones. Incluso puede que después de diarrea esté estreñido un par de días. Todo volverá pronto a la normalidad.
- Recuerda siempre poner agua limpia y fresca a su disposición. La hidratación también es esencial para recuperarse de una enfermedad.
Qué debes evitar para alimentar a tu perro
- Descarta añadir cereales a la dieta blanda para perros. Puede correr el riesgo de que empeore su digestión debido a la fermentación, además de que no tienen un gran valor nutricional.
- Mientras siga teniendo problemas digestivos, no le des grasas de ningún tipo.
- Si acostumbras a dar a tu perro huesos para comer, deja este hábito de lado mientras siga enfermo.
- Modera el ejercicio durante los días de enfermedad y convalecencia. Lleva un ritmo algo más bajo de lo normal, ¡está malito!
- No mezcles la dieta blanda que te hemos recomendado con pienso. Los procesos de digestión son muy diferentes y podrías empeorar el proceso.
- No mediques a tu perro por tu cuenta, consulta siempre con un profesional.