Bella es una perrita de dos años un poquitín hiperactiva. Le encanta ir en busca de aventuras y es bastante traviesa a pesar de ser muy pequeña. Sin embargo, ha encontrado la solución para seguir con sus travesuras: el cómplice perfecto.
Una pareja inseparable
Hank tiene 10 años y… ¡Se ha convertido en el mejor amigo de Bella! Aunque él vive con los abuelos de Bella, se ven casi todos los días y cuando están juntos son inseparables.
«Se quieren muchísimo», dijo Adriana Burkhart a The Dodo. «Bella vive conmigo y Hank en casa de mis padres, pero cuando se ven se vuelven locos. Se abrazan, duermen juntos… Y Bella siempre está persiguiéndolo y intentando jugar con su cola. Él es mucho mayor que ella, así que simplemente se sienta a su lado hasta que ella para.»
Siempre encima de su espalda
Bella se dio cuenta pronto de que Hank le superaba considerablemente en tamaño, así que se aprovechó de la situación: empezó a usarlo como apoyo para las cosas que ella no podía hacer sola. Para echarse una siesta, para merodear por la casa, para robar la comida… Da igual la razón, Bella siempre está encima de Hank y a él parece no importarle en absoluto.
«Bella está casi todos los días en su espalda. También salta encima de él cuando necesita ayuda para algo. Lo usa como transporte, como escalera, como sitio para echar la siesta, o incluso para saltar por una verja.
Hank ya es un perro mayor, y sin Bella puede que simplemente estuviera durmiendo o vagueando todo el día. Sin embargo, la pequeña perrita le mantiene activo y aventurero.
¿Conoces alguna amistad tan bonita entre animales? ¡Cuéntanosla!