La actividad física es esencial para las mascotas, pues es una de las condiciones más importantes para mantener controlado su peso. Sin embargo, los beneficios del ejercicio físico para un gato van más allá. ¡Veamos cuáles son!
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El ejercicio físico para el gato: un cuidado fundamental
Tener una mascota en casa implica mucha responsabilidad, pues hay que atender correctamente a todas sus necesidades.
Aunque observes a tu gato mucho tiempo al día tumbado, lo cierto es que también disfruta haciendo actividad física. Y no solo es que la disfrute, ¡es que la necesita!
Un gato requiere practicar una media de 30 minutos de ejercicio diario de manera moderada.
Esto le permitirá mantenerse saludable, especialmente en lo que a no padecer problemas de peso y patologías derivadas del mismo se refieren.
Pero veamos con más detalle los beneficios del ejercicio físico para un gato.
Beneficios del ejercicio físico para mi gato
Los expertos señalan, principalmente, cuatro beneficios del ejercicio físico para el gato. Estos son:
Mantiene su salud más estable
Los felinos son animales con fácil tendencia al sobrepeso y la obesidad.
Para evitar que tu gato esté gordo, hay dos claves fundamentales a cuidar: una es la alimentación y la otra es la actividad física.
Por ello, es esencial que tu mascota se mantenga activo todos los días.
Además, esto no solo ayudará a mantener su peso bajo control, sino que aplacará los riesgos de sufrir enfermedades derivadas del sobrepeso y que son potencialmente peligrosas. Una de ellas es la diabetes.
Un peso por encima del superior también evita que el animal padezca problemas en sus articulaciones, provocados por tener que aguantar más peso del que pudiera.
Ayuda a mantenerlos más tranquilos
Otro de los beneficios del ejercicio físico para el gato es que este ayuda a mantener su calma mental.
Y es que, como sabéis, la actividad física no solo es beneficiosa para el cuerpo, sino también para la mente.
Además, cuando el animal realiza ejercicio, gasta mucha energía, lo que favorece que esté más relajado y no dirija esa energía hacia actitudes destructivas.
Crea y consolida lazos con su dueño
El gato debe tener la posibilidad de entretenerse y moverse en casa por cuenta propia. Sin embargo, los juegos entre humano y felino también son una forma muy positiva de que el animal haga ejercicio.
Esto, además de ser favorable para la salud física y mental del gato, también implica otra consecuencia muy óptima: ayuda a formar vínculos afectivos sólidos entre el gato y su dueño.
Desarrollan sus habilidades naturales
Favoreciendo el ejercicio físico de tu mascota en casa por medio de diversas actividades y juguetes, colaboras en que tu gato mantenga vivo su espíritu más natural e innato: el de un ser muy curioso y cazador.
Si tu mascota tiene acceso al exterior en una zona natural, lo tiene muy sencillo para dar rienda suelta a su naturaleza y al estímulo de sus sentidos.
Sin embargo, en casa, necesitarás ofrecerle el espacio y los objetos adecuados (ratones de juguetes, objetos que emitan alguna señal sonora, como una pelo ta con cascabel, rascadores, estructuras de diferentes alturas, etc.) para que pueda ser ellos mismos mientras, además, se ejercitan.
Cómo hacer que el gato haga ejercicio en casa
Conseguir todos los beneficios del ejercicio físico para el gato sin que este salga de casa es más sencillo de lo que piensas.
Lugares elevados
A los gatos les encanta subir a las alturas, pues desde esa posición pueden controlarlo todo y sentir más seguridad en su entorno.
Por ello, lo ideal es facilitarle la posibilidad de subir a diversas alturas. ¿Cómo? De varias maneras:
- Con rascadores de diferentes niveles. Existen muchos tipos de rascadores y estos son un objeto fundamental para los gatos. No solo porque les ayuda a mantener sus uñas arregladas, sino que también pueden servirle como zona de descanso si cuentan con varios pisos y módulos para que reposen.
- El mobiliario de tu hogar. Otra manera de hacer que el gato se ejercite es permitiéndole subir a los muebles y estanterías de tu casa, quitando de su camino todo aquello que pudiese impedírselo.
Esconde su comida
Los gatos salvajes están muy acostumbrados a tener que buscar y cazar su comida. Por ello, otra de las maneras de conseguir los beneficios del ejercicio físico para el gato es distribuyendo su comida diaria en varias raciones por casa para que las encuentre.
Eso sí, debes asegurarte de que finalmente encuentra todas las raciones, porque no es adecuado que el felino coma menos de lo que debería.
Además, si optas por esta actividad, también puedes probar a colocar esas raciones en diferentes alturas.
Juegos y juguetes
Por supuesto, otra parte fundamental para que el gato haga ejercicio en casa son los juguetes que le proporciones, así como los juegos de los que tú también formes parte.
Para él son importantes las pelotas, los objetos que se mueven y los pequeños peluches, especialmente aquellos con forma de roedor. Por su parte, para los juegos compartidos entre humano y felino, las cañas son una de las opciones preferidas, así como las pelotas con cascabel para que se las lancemos.
Ahora ya conoces todos los beneficios del ejercicio físico para el gato, así como las formas de ayudarle a hacerlo en casa. No obstante, cabe recordar que la cantidad y la forma de ejercitarse va a depender también de la edad y las características del animal. No puedes exigirle la misma agilidad y actividad a un gato joven que a un senior.
Ten mucho cuidado con esto. Si no lo tienes en consideración, podrías estar perjudicando a tu gato.
Por ejemplo, si le pones a tu gato mayor la comida a una altura considerable y este tiene problemas de huesos y/0 articulaciones, posiblemente le cueste acceder a ella y deje de comer por esa razón o coma menos. Por ello, nuestro consejo es que consultes siempre a tu veterinario de confianza para tener claras las necesidades de tu mascota y cómo cubrirlas. Este te dará las pautas correctas en todo momento.
