¿Iguana marina? ¿Pero las iguanas no viven en zonas de vegetación? Pues resulta que esta iguana está muy vinculada al mar. Además, hay muchísimas más curiosidades que hacen que este animal sea fascinante. Si quieres descubrirlas todas, ¡no te pierdas este nuevo artículo!
Cómo es la iguana marina de Galápagos
Esta iguana pertenece al género Amblyrhynchus y puede llegar a medir cerca de metro y medio y pesar unos 1.5 kg. Se trata de un animal muy peculiar, uno de los pocos lagartos con facilidad para desenvolverse en el agua; de hecho, suele frecuentar mucho el mar, se meten hasta zonas muy profundas en busca de alimento, ¡pueden aguantar hasta 45 minutos bajo el agua! La iguana marina de Galápagos tiene una aleta dorsal, membranas en las patas y una cola alargada que hacen que sea una excelente nadadora; además, sus afiladas garras hace que salga del mar con facilidad, a pesar de la fuerza de la marea. En tierra, sin embargo, es un poco más torpe.
Tiene el cuerpo de color negro cubierto de espinas en la zona dorsal y la cabeza. El color oscuro hace que recuperen con facilidad el calor tras salir del agua. De todos modos, este no es su único truco para conservar su temperatura: ¡son capaces de ralentizar o incluso parar su corazón cuando nadan para no perder calor!
Se trata de un animal ovíparo. En época de apareamiento, las hembras buscan lugares seguros para desovar tras haber sido fecundadas y construyen un nido seguro para sus crías.
Hábitat y alimentación de la iguana marina de Galápagos
Esta iguana marina es natural de las islas Galápagos, en Sudamérica. Viven en playas, ciénagas y otras zonas cercanas a la costa para poder entrar al mar a por alimento y además recibir todo el calor que su cuerpo necesita.
Se sabe que esta iguana tiene los mismos orígenes y ancestros que el resto de iguanas terrestres, pero resulta que evolucionó hasta ser capaz de desenvolverse en el medio acuático. Es por eso que se alimenta básicamente de algas y otras plantas marinas. ¡Al contrario de lo que sugieren sus impactantes garras, no comen nada de carne! Las plantas terrestres también pueden formar parte de su dieta en caso de necesidad, ¡pero las marinas son sus favoritas!
Los machos de iguana marina son los encargados de entrar al agua a por comida; su hocico alargado les permite agarrar las plantas que encuentran en las grietas y pequeños huecos entre las rocas. Las hembras, que no saben nadar, aprovechan para comer cuando baja la marea.
Para mantenerse bien hidratadas, las iguanas marinas tienen un mecanismo natural de expulsión de la sal por medio de unas glándulas en su cuerpo. Así no acumulan sal marina en su organismo ni su piel.
¿Conocías a la iguana marina de Galápagos? ¡Se trata de un animal fascinante lleno de curiosidades!