El verano es época de riesgo de golpe de calor en gatos. ¡Hay que protegerlos lo máximo posible, el calor puede ser muy peligroso! Si tu gato sufre un golpe de calor, esto podría provocarle daños irreversibles, o incluso la muerte.
Te contamos cuáles son los síntomas del golpe de calor para que puedas detectarlos a tiempo y actuar, además de cómo puedes prevenirlo.
Golpe de calor en gatos, ¿qué lo causa?
La temperatura normal de los gatos está entre los 38 y los 39,5º. Cuando suben de esa temperatura, el cuerpo intenta autorregularse por medio del sudor en las almohadillas, los genitales, la saliva y mediante jadeos. Si sólo sube un poco, no pasa nada, con esos mecanismos pueden regularse sin problemas, pero hay ciertos grupos más susceptibles a que la situación se agrave y sufrir un golpe de calor: los gatos ancianos y los muy jóvenes, los enfermos y los obesos.
¿Qué causa el golpe de calor en gatos? Lo que desencadena este problema más a menudo es:
- Falta de agua: ¿sabías que los gatos no beben mucha? Pero cuando hace mucho calor, es importante asegurarse de que se hidrata bien.
- Altas temperaturas, calores sofocantes, peor aún si el ambiente es húmedo.
- Falta de ventilación: mantener al gato en un lugar cerrado incrementa el riesgo de golpe de calor (dentro del coche, en una jaula o transportín…).
- Exposición al sol durante mucho rato: la acción directa del sol, especialmente en la cabeza, es un riesgo muy grande. ¡Ofrécele lugares frescos y a la sombra!
Síntomas del golpe de calor en gatos
Ya sabemos qué causa los golpes de calor en los gatos, pero ¿cómo saber si está sucediendo? Deberías alarmarte si observas:
- Temperatura mayor a 42º
- Debilidad
- Salivación excesiva
- Ritmo cardíaco elevado
- Temblores
- Lengua azulada
- Dificultad para caminar, se tambalea y parece mareado
Como hemos dicho, el golpe de calor es muy peligroso para los gatos y hay que actuar cuanto antes o podría morir. Si sospechas que tu gato tiene un golpe de calor, deberás llamar de urgencia al veterinario, pero además puedes seguir estos consejos para practicarle unos primeros auxilios…
Qué hacer ante un golpe de calor en gatos
Ayudar a tu gato urgentemente es lo más importante. No puedes dejar de llamar al veterinario, pero además, estos primeros auxilios te ayudarán a hacer que se encuentre mejor a corto plazo:
- No quieras bajar su temperatura radicalmente, es mejor hacerlo de forma gradual. Si no, podrías provocarle una hipotermia.
- Traslada a tu gato a un lugar bien fresco de la casa, donde no le dé el sol. Puedes tumbarlo en el suelo y ayudar con un ventilador a mínima potencia.
- Mantén su boca húmeda, puedes utilizar un spray con agua. No dejes que se seque, repite cuanto sea necesario.
- Con gasas o trapos pequeños húmedos, refresca su cuerpo: céntrate en la cabeza, las patas, el pecho, el cuello y la tripa. No utilices una toalla grande para envolverlo entero, es mejor ir poco a poco.
- Revisa su temperatura con un termómetro hasta que vuelva a bajar a los 39º.
Cuando se estabilice en una temperatura segura, tendrás que llevarlo al veterinario para que lo revise y pueda descartar secuelas, además de mandarle algún tratamiento de recuperación si es necesario, como por ejemplo vitaminas o sales minerales.
Aprende a prevenir el golpe de calor en gatos
Un golpe de calor en gatos se puede solucionar si se trata a tiempo, ¡pero lo mejor es prevenirlo! Para mantenerlo fuera de peligro, sigue estos consejos:
- NUNCA dejes a tu gato dentro del coche, y mucho menos en verano. Aunque esté a la sombra, un coche puede acumular un calor peligrosísimo en apenas unos minutos. Tampoco lo dejes metido en el transportín, estas bolsas son de uso temporal y bajo vigilancia.
- Asegúrate de que tu gato tiene acceso a agua fresca en todo momento.
- Déjale siempre disponible una zona fresca o de sombra.
- Si tu gato es de pelo largo, en verano puedes acudir al peluquero para que recorte el manto externo. ¡Pero nunca debes pelar a tu gato por completo! El pelo es la única protección que tienen frente al sol, sin él, se queman.
- Evita que tu gato sea obeso. Mantenle bien activo, ¡pero tampoco te pases! El ejercicio demasiado intenso también produce mucho calor.
- Dale su comida al atardecer y en un lugar fresco.
Para que tu gato no sufra golpes de calor este verano, ¡simplemente cuídalo! Vigila que esté en lugares frescos, si le gusta salir a la calle, no se lo permitas en las horas de más calor.