Existen muchísimas razas de conejos diferentes, pero todas tienen en común lo bonitas que son. ¡Y es que los conejitos son animales verdaderamente adorables! Hoy queremos hablaros de uno muy amado por las familias, especialmente aquellas que tienen peques en casa: el conejo holandés. ¡Así es este conejito!
El conejo holandés que no proviene de Holanda
Al conejo holandés se le conoce también por otros nombres, aunque el más común es conejo Dutch. Sin embargo, si nos centrásemos en la primera opción, es decir, conejo holandés, quizás consideraríamos clara su procedencia. ¿No es así? ¡Pues es un error!
Resulta que el origen real de este conejito está en Inglaterra a principios del siglo XIX. Sus predecesores, los conejos conocidos como Petits Brabaçons, llegaron a Inglaterra desde Bélgica con la misión de servir como alimento.
Sin embargo, de ellos se seleccionaron algunos ejemplares para realizar cruces con otros, dando lugar a la que hoy conocemos como raza de conejo holandés.
Rasgos físicos del conejo holandés
Al hablar del tamaño y peso del conejo holandés hay que diferenciar entre el estándar y el conejo holandés mini.
El mini es una raza toy y su peso ronda, tan solo, el kilogramo y medio. Por su parte, el estándar tienen un tamaño mediano y pesa entre 1,7 y 2,2 kg, aproximadamente.
Las orejas son largas y las mantiene levantadas. Su cabeza es grande, destacando sobre su cuerpo pequeño. Tiene las patas delanteras más largas que las traseras y sus ojos son ovalados. Estos pueden ser de diferente color, al igual que su pelaje.
En cualquier conejo holandés siempre encontraremos el color blanco. Este suele formar una franja ancha en la parte superior de su pecho. El blanco hará de división y contraste con otros colores, de los cuales los más comunes son: el negro, el gris, el gris azulado, el marrón chocolate y el castaño con toques negros.
El comportamiento del conejo holandés
Decir que el conejo holandés es uno de los conejos preferidos como mascotas da una pista sobre su magnífico carácter.
Se trata de un animal dócil y cariñoso, que es capaz de forjar grandes vínculos afectivos con su familia humana. ¡Además es muy inteligente!
Tiene un carácter bastante apacible, aunque también es muy sociable y divertido, especialmente en el caso de los machos.
Ofreciéndole los cuidados adecuados, de los que hablaremos a continuación, disfrutarás de este conejito entre 6 y 8 años, que es la media de su esperanza de vida.
Cuidados más importantes del conejo dutch u holandés
Entre los cuidados más importantes que hay que brindarle a este animalito, cabe destacar los relacionados con su higiene y su alimentación.
La higiene y aseo
El pelo del conejo debe ser cepillado con cierta frecuencia, pues eso ayudará a mantenerlo limpio al eliminar la suciedad superficial y los pelos muertos.
Además, los baños en los conejos no está recomendados, pues causan estrés al conejo, eliminan la capa de aceite natural protectora de su piel y pueden enfermar si no se secan correctamente.
Por ello, a no ser que se dé una situación extrema de suciedad, es mejor no hacerlo. ¡Y de hacerlo solo se recomienda que sea una o dos veces al año!
Por otro lado, encontramos la importancia de revisar y limpiar las orejas de tu conejo. Al tenerlas muy grandes y erguidas es muy fácil que en ellas se acumule suciedad, ácaros, bacterias e, incluso, se introduzca algún elemento externo que pueda dañar al animal. ¡Es importante que cada semana revises sus orejas para llevar a cabo una limpieza!
No hay que olvidar tampoco sus dientes, que no paran a crecer a lo largo de toda su vida. Para que puedan limarlos y evitar problemas en su dentadura, es esencial que tengan a su alcance elementos y/o juguetes de origen natural para roer. Son especialmente útiles aquellos de heno o madera.
Su uñas también crecen con rapidez, por ello hay que limarles o cortarles con mucho cuidado las puntas para que no se hagan daño con ellas ni les molesten.
Y estos son solo los principales cuidados, pero hay muchas más cuestiones relacionadas con la higiene de los conejos que no debes descuidar si adoptas a uno como mascota.
La alimentación
La dieta de los conejos está compuesta, principalmente, de heno, pellets, frutas y verduras. Existe pienso específico para conejos, pero no es adecuado usarlo como único alimento. Más bien debe emplearse como complemento.
Por supuesto, hidratarse también es de suma importancia para ellos, por lo que no debe faltarle nunca agua limpia y fresca a su alcance. ¿Tienes peques en casa? Encomendarles esta tarea es una de las formas más básicas de empezar a enseñar a los niños a cuidar de las mascotas.
Otros cuidados: jaula, juegos y ejercicio
Aunque teniendo mucha precaución, el conejo puede y debe (al menos durante varias horas al día) estar suelto por casa, también hay que proporcionarle una jaula donde pueda descansar y refugiarse, comer tranquilamente y hacer sus necesidades.
Dicha jaula debe ser lo suficientemente grande como para que en ella entre el conejo, pueda moverse con libertad y haya espacios diferenciados entre las zonas de descanso, de «aseo» para hacer sus necesidades o zona de juegos.
Lo que sí es importante es que la base de la jaula sea lisa, pues las rejas pueden provocar lesiones en las patas del conejo. Además, hay que añadir un sustrato. Este será, preferiblemente, de virutas de madera o paja y se cambiará cada semana, al igual que hay que limpiar el resto de elementos de la jaula y esta en sí misma también.
En cuanto a los juegos, debes tener en cuenta ciertos tips a la hora de jugar con los conejos. Lo principal es ganarte su confianza y ser delicado con ellos. Si tienes en cuenta estas pautas, ¡los juegos se convertirán en vuestro mejor momento juntos!
Para jugar con tu conejo holandés, puedes elaborar circuitos con cajas de cartón, túneles caseros, etc.
Lanzar una pelota también puede ser un buen entretenimiento para el conejo, especialmente si esta tiene un cascabel. ¡Les suele atraer bastante su sonido!
Al fin y al cabo, lo que debes recordar y que es verdaderamente importante es que, además de divertirse, el conejo haga ejercicio fuera de su jaula, algo esencial para su salud.
¿Preparados para tener a un fabuloso conejo holandés como mascota? ¡Es una gran decisión!