Los ladridos de un perro son una de las formas más habituales que tienen estos seres para comunicarse, tanto con nosotros como con otros perros o animales. Podemos escuchar desde el dulce tono de un cachorrito hasta el estruendoso ladrido de un perro adulto, pero cada ladrido tiene su significado propio. Sin embargo, ante esta cuestión, puede surgir una duda clave: ¿cuándo empieza a ladrar un cachorro? ¡Te invitamos a descubrirlo con Wakyma!
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¿Cuándo empieza a ladrar un cachorro?
Si te preguntas cuándo empieza a ladrar un perro, debes saber que aunque sea el sonido característico de este animal, no nacen con esa habilidad.
Los cachorros, al igual que los bebés humanos, empiezan a explorar el mundo que les rodea desde una temprana edad. No obstante, los ladridos no suelen ser la primera forma de comunicación que desarrollan.
Por tanto, al principio de su vida, los cachorros se comunicarán principalmente a través de otros sonidos, como gemidos, gruñidos y lloriqueos. A través de ellos irán expresando sus necesidades básicas, tales como hambre, frío o deseo de atención.
Pero entonces, ¿cuándo empiezan a ladrar los perros? Pues bien, a medida que los cachorritos crecen y empiezan a socializar con otros canes y con humanos, irán incorporando los ladridos a su repertorio de comunicación.
Este proceso comienza, generalmente, alrededor de las 6-8 semanas de vida, aunque según las circunstancias que rodeen al pequeño peludo, pueden llegar a tardar un poco más en descubrir esta forma de expresión.
¿Por qué ladra un perro?
Ahora que sabes cuándo empieza a ladrar un cachorro, puede surgirte otra pregunta: ¿por qué ladran los perros?
La realidad es que los perros ladran por una gran variedad de razones y es importante comprender qué motiva el ladrido para poder interpretar su lenguaje. Entre las razones más comunes encontramos:
- Comunicación social entre perros. Con los ladridos pueden mostrarse alegría, tristeza o simplemente el deseo de que interactuemos con ellos o interactuar entre ellos.
- Alerta. Los perros son unos guardianes excelentes, por eso a menudo usan el ladrido para alertar de la presencia de extraños o de situaciones poco habituales.
- Miedo o ansiedad. Los perros también pueden ladrar como respuesta a ciertas situaciones que le generan miedo o ansiedad.
- Juego. Los cachorros y canes jóvenes a menudo ladran durante el juego para mostrar su entusiasmo y emoción.
Influencia del entorno en el ladrido
Como hemos mencionado al hablar de cuándo empieza a ladrar un perro, algunos peluditos pueden tardar un poco más en descubrir su propio ladrido como forma comunicativa, siendo el entorno una razón para ello.
El entorno en el que crece un perro y la educación que se le da son factores cruciales en cómo desarrollará este su comportamiento de ladrido. Por ejemplo, la exposición temprana a diversos estímulos, interacciones sociales positivas y una educación basada en recompensas, contribuyen a un comportamiento de ladrido equilibrado.
Además, los dueños de estos animales también desempeñan un papel vital en la gestión del comportamiento de ladrido.
En concreto, la consistencia en la aplicación de comandos, el refuerzo positivo y la comprensión de las necesidades del perro son aspectos esenciales para fomentar un comportamiento de ladrido saludable. Por ejemplo, para evitar que el perro ladre por todo.
En definitiva, los perros empiezan a ladrar durante las primeras semanas de vida, pero el desarrollo completo de esta habilidad dependerá de factores individuales y ambientales.
