Ir con tu perro a la playa cada vez es más fácil, si recuerdas, ya te contamos cuáles son las playas a las que puedes ir con tu perro. ¿Has elegido destino y estás preparando las maletas? Antes de partir, lee estos consejos para ir con tu perro a la playa, ya que harán la experiencia mucho más fácil y agradable, tanto si es la primera vez como si ya habéis ido juntos de vacaciones anteriormente.
Consejos para ir con tu perro a la playa
Es genial que cada vez más playas de España acepten a perros en su arena y entre sus olas. La playa es uno de los tipos de turismo favoritos de casi todo el mundo, y es estupendo poder compartir esta experiencia con nuestros mejores amigos de cuatro patas. Si nosotros podemos disfrutarlo, ¿por qué ellos no?
Para sacar el máximo partido a vuestro día de playa, los consejos a seguir son los siguientes:
Antes de ir a la playa
Parece muy obvia esta pregunta, pero ¿te has asegurado de que la playa a la que vas acepta perros? Es fundamental. Si ya estás seguro, ¡toca preparar la mochila de tu perro! Igual que tú, él también necesita llevar cosas:
- Su cartilla y papeles.
- Comedero y bebedero.
- Comida y snacks si vais a estar mucho rato.
- El agua es imprescindible.
- Bolsas por si hace caca.
- Algún juguete, mejor aún si flota.
- Una sombrilla, es mejor que no le dé demasiado el sol o podría sufrir un golpe de calor.
- Si tu perro no tiene pelo, es necesaria crema solar.
- Si tiene las almohadillas sensibles, puedes utilizar un protector.
- Cualquier otra cosa que tu perro en particular pueda necesitar.
En la playa
Al llegar a la playa, busca un sitio tranquilo donde no haya demasiada masificación de gente. Lo ideal sería ir en horas de poca afluencia, que además suele hacer menos calor.
Si puedes acceder a una zona de sombra, no dudes en hacerlo. Si no, tendrás que dejar a tu perro ponerse bajo la sombrilla.
Tu perro necesitará beber agua con frecuencia, ¡pero no dejes que sea agua de mar! En lugar de hidratarlo, podría causar el efecto contrario e incluso causarle problemas intestinales. Guarda el agua protegida del sol para mantenerla fresca.
La playa es divertida, pero tu perro puede correr peligro si no vigilas constantemente lo que hace, ¡no le quites el ojo de encima! Si quiere bañarse, tendrás que ir con él a una zona de poca profundidad. No recomendamos que entres al agua con tu perro si no hay bandera verde. Si tu perro tiene miedo al agua y no va a querer bañarse, es interesante echarle agua tú mismo por encima de vez en cuando para mantenerlo fresco.
Será necesario que descanse, no permitas que haga ejercicio demasiado intenso o prolongado bajo el sol. La arena seguro que le encantará, pero ¡vigila que no se la coma! Algunos lo hacen. Además, mantente alejado de zonas que puedan resultar peligrosas por tener piedras afiladas, colillas o cristales.
Si tu perro cava hoyos, vuelve a llenarlos antes de volver a casa para que nadie se haga daño.
Al volver a casa
Para eliminar los restos de sal y arena y refrescar a tu perro, dale un baño. Basta con enjuagarlo con agua, no es necesario utilizar champú si no está muy sucio, especialmente si vais a ir a la playa más días. ¡Recuerda que no se debe utilizar champú para perros tan a menudo!
Revisa sus orejas en busca de agua o arena que pudiera haberse metido. Si en los días posteriores tu perro agita la cabeza, se rasca las orejas o se siente mal en general, puede ser señal de otitis o de oídos taponados con agua. ¡Deberás acudir al veterinario!
Esperamos que nuestros consejos para ir con tu perro a la playa te ayuden a sacar el máximo partido al verano. ¡Disfruta de las vacaciones!