La artrosis canina afecta a los perros igual que a nosotros. Los dolores que produce la artrosis en las articulaciones son realmente desagradables, especialmente cuando llega el frío. ¿Crees que tu perro podría tener artrosis? ¡Atento a los síntomas que podrás detectar!
Claves para detectar la artrosis canina
Cuando los perros empiezan a desarrollar artrosis, muestran unos síntomas muy distintivos. Sólo tendrás que observar:
- Camina rígido, le cuesta moverse, incluso va encorvado y no quiere subir ni bajar escaleras
- Rechaza el ejercicio físico y el juego
- Le cuesta retomar los movimientos al levantarse, camina con dificultades, tenso o incluso con cojera
- Si le duele mucho y se encuentra mal, incluso puede ser que esté apático y no quiera comer
- Se muestra huidizo cuando intentas acariciarle las patas; si lo hace, no insistas
- Tiene cojera intermitente
La artrosis es una enfermedad degenerativa y por tanto no tiene cura, pero sí existen tratamientos que ayudan a paliar los síntomas y a frenar el avance de la enfermedad. Si tu perro muestra síntomas de artrosis canina, es importante que acudas al veterinario cuanto antes.
Cómo ayudar a tu perro a mejorar
Como decimos, por supuesto, la visita al veterinario es obligatoria; ante cualquier síntoma de enfermedad es necesario contar con un tratamiento profesional, un seguimiento de confianza.
Aparte de seguir las indicaciones de tu veterinario, hay otras cosas que puedes hacer en casa para conseguir que tu perro se sienta lo mejor posible:
- Las esterillas calientes y bolsas de agua aplicadas sobre las articulaciones ayudan mucho a reducir el dolor.
- Los masajes antes de realizar actividad física ayudan a paliar las molestias y preparan a las extremidades para la acción. Hazlo con suavidad y cuidado, pregunta a tu veterinario los mejores métodos de masaje para tu mascota.
- En los casos de artrosis canina es mejor evitar el ejercicio demasiado intenso y los impactos, así que sustituye los saltos y sprints por paseos más calmados en superficies estables.
- La fisioterapia y la terapia en agua pueden ser de gran ayuda.
- Algunos complementos nutricionales, como los condroprotectores, son útiles para reforzar el cartílago y frenar el avance de la artrosis. Pregunta a tu veterinario.
- Puedes informarte sobre los protectores articulares para perros, ayudan a amortiguar los movimientos y alivian el dolor.
- Evita exponer a tu perro a temperaturas bajas, el frío empeora los síntomas de artrosis, al igual que la humedad. Ofrécele un ambiente confortable y cálido en casa y evita pasear en las horas más frías del invierno o cuando llueve.
La artrosis canina es compleja, pero debes comprometerte a cuidar a tu mascota y a darle la mejor calidad de vida posible. ¡Juntos lo conseguiréis!
