Si hay una actividad que motiva a los felinos, esta es, sin duda, acechar y asaltar a cualquier objeto de pequeñas dimensiones que se mueva ante sus ojos. Eso incluye, por supuesto, a pequeños animales como ratones, lagartijas… y sí, cucarachas. Pero, ¿los gatos se comen las cucarachas? Teniendo en cuenta que son unos insectos desagradables, es normal que te hagas esta pregunta con preocupación. Veamos la respuesta.
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¿Los gatos se comen las cucarachas?
Como sabéis, los gatos salvajes cazan, entre otras cosas, pequeños roedores para alimentarse de ellos y sobrevivir. Por ello, nos puede surgir la duda de si cuando un felino caza otro ser vivo, también es para comer.
Es habitual que si transitan por zonas sucias en las que pueden proliferan insectos como arañas y cucarachas, se topen con ellas. Sin embargo, los felinos prefieren ingerir otros insectos como mariposas, moscas u hormigas. Es decir, no tienen la tendencia innata de ingerir insectos potencialmente venenosos, como pueden ser las abejas, las arañas o las cucarachas en ciertos casos.
Así que se podría decir que, por naturaleza, los gatos no se comen las cucarachas.
Eso sí, eso no implica que no interactúen con ellas. Sobre todo en el caso de los gatos más jóvenes, pueden dedicar un buen rato a jugar con la cucaracha.
Para ello, la perseguirán y atraparán con sus patas, la lanzarán por los aires, la soltarán para que huya, y vuelta a empezar con todo el juego. Lo cierto es que suena a pura tortura para la cucaracha, pero así funciona el reino animal.
Muchos, incluso, dejarán el juego solo cuando la cucaracha esté muerta. Otros, en cambio, procederán a comérsela. Porque sí, los gatos no se comen las cucarachas habitualmente, pero en ocasiones, podría pasar.
Mi gato se comió una cucaracha: ¿es peligroso?
Vamos a suponer que sí, que los gatos se comen las cucarachas en ciertas ocasiones. ¿Es peligroso para ellos?
Está claro que ingerir insectos como abejas o arañas es altamente peligroso por el veneno que poseen. En ese aspecto no es el caso de las cucarachas, pero aun así puede resultar muy peligroso para su salud por varios motivos.
- Debido a que su exoesqueleto es rígido, podría ocasionar atragantamiento.
- Además, también su ingesta puede llegar a irritar las mucosas bucales y gastrointestinales del animal.
- Por otro lado, podría ser que la cucaracha esté infectada por un parásito intestinal que transfiera a tu mascota.
- Adicionalmente, la cucaracha podría estar impregnada de un insecticida, lo que provocaría intoxicación en el gato.
Señales de que un gato se ha comido una cucaracha
Si los gatos se comen las cucarachas, pueden presentar algunas señales que nos ayudarán a confirmar este hecho. Entre dichos síntomas, se encuentran:
- Diarrea.
- Vómitos.
- Irritación en la boca.
- El gato muestra signos de dolor abdominal.
- Tos.
- Arcadas.
- En caso de que lo que se produzca es una intoxicación derivada de un insecticida, también aparecerán fiebre y temblores.
¿Qué hago si mi gato ha comido una cucaracha?
Si observas alguno de los síntomas mencionados u observas que el gato se está atragantando, debes acudir de inmediato al veterinario. Incluso intentar sacarle la cucaracha por tu cuenta puede ser perjudicial y agravar el problema, porque recordemos que su cuerpo es duro.
Tampoco es aconsejable que le obligues a beber y, en ningún caso, le mediques sin supervisión de un profesional.
Además de esto, como es normal, lo aconsejable es prevenir el problema. Para evitar estas situaciones, debes extremar la higiene de tu casa y no permitir al gato que transite por zonas por las que sepas que puede encontrar cucarachas.
Mi gato me trae cucarachas muertas
Más allá de que los gatos se coman las cucarachas, como hemos dicho, lo que suelen hacer es jugar con ellas hasta que se cansan o hasta que estas mueren y dejan de ser divertidas.
En ese caso, podría pasar que tu gato coja esa cucaracha muerta y la deposite cerca de ti. Tan cerca, que puede colocarla encima de ti.
Para nosotros puede resultar algo verdaderamente desagradable, pero lo cierto es que para tu gato, este acto implica todo lo contrario: es una ofrenda de amor. Sí, como lo lees.
Cuando un felino te “regala” un animal muerto, está expresando el cariño que te tiene. Lo puede hacer dejándotelo en modo de presente o en modo de ayuda alimentaria, pues considera que eres de su familia y debe cuidarte. Esto sucede especialmente cuando se trata de un ratón.
Sabemos que puede resultar muy difícil no reaccionar en contra del animal, pero piensa que él lo hace con buena intención y que no debes regañar al gato por ello. Eso solo afectaría a la relación que tiene contigo.
Por último, cabe recordar que para tu gato es toda una aventura explorar lugares nuevos y perseguir a otros animales, pero esto puede ser peligroso para él. Es cierto, como hemos visto, que las cucarachas no son el insecto más peligroso con el que se pueden encontrar, pero aun así, es mejor evitar que entren en contacto con ellas.