Cuando optamos por una dieta casera para nuestras mascotas lo ideal es que tengamos muy claro qué alimentos pueden componerla y cómo ofrecérselos al animal. Por ejemplo, ¿los perros pueden comer apio? Te hablamos de si esta verdura es una de las apropiadas para los canes.
Verduras para perros
La verdura es uno de los componentes a incluir dentro de la alimentación canina. Dependiendo de cuál elijas puede gustar más o menos a tu mascota, pero siempre debería estar presente en su plato si se le quiere ofrecer de verdad una dieta equilibrada. Eso sí, de una forma moderada y no como alimento principal.
Las verduras son una gran fuente de vitaminas y fibra, además de beneficiar al sistema digestivo. Dentro de las verduras más beneficiosas para los perros encontramos:
Pero, ¿los perros puede comer apio?
La respuesta es sí, los perros pueden comer apio. De hecho, de él obtienen los mismos beneficios que consigue el ser humano.
Eso sí, el consumo de origen vegetal, sea fruta o verdura, debe conformar el 10-15% de la ingesta total diaria de la mascota. Es decir, para nada estos alimentos deben ser los protagonistas de su plato. La carne debe ser lo predominante.
¿Qué aporta el apio a los perros?
Para entender por qué el apio se trata de una verdura muy saludable y beneficiosa para tu mascota, debemos pararnos a analizar el contenido nutricional del apio.
Además de poseer grasas, proteínas, carbohidratos y ser rico en agua, cuenta con otros componentes muy saludables.
Entre las vitaminas que posee se encuentran la vitamina B1, B2, B3, B5, B6, C y K. También contiene minerales tan importantes como el hierro, magnesio, calcio, manganeso, potasio, sodio, zinc y fósforo.
Cómo dar apio a un perro
Lo primero que tienes que considerar a la hora de dar apio a tu perro es que este tiene que estar en buen estado. Nunca se deben apartar las verduras en malas condiciones y que no comeríamos los humanos para dárselas a un animal: a ellos les hará el mismo daño que nos haría a nosotros.
Observa el apio y comprueba que las ramas y hojas tienen un tono verde brillante. Deshecha cualquier parte que no sea así.
Procede a lavar muy bien el apio para eliminar cualquier suciedad externa. Lávalo a conciencia, pues el siguiente paso será cortarlo y ofrecerlo al perro.
Sí, porque los perros pueden comer apio crudo. Para ello, además de lavarlo bien, debes cortarlo en trozos pequeños para colocarlos encima de su comida. De hecho, si ves que a tu peludo le gusta mucho, puedes usarlo como premio o snack.
Por otro lado, debes saber que también pueden comerlo cocido. Para ello, recuerda que no debes condimentarlo, ni con sal ni con cualquier otro aditivo.
A la hora de cortar el apio ten en cuenta el tamaño de la mandíbula del animal para no hacer trozos muy grandes que conduzcan a asfixia.
Recuerda no sobrepasar la cantidad total de verdura diaria. Además, si es la primera vez que ofreces apio al perro, puedes comenzar con una cantidad menor para verificar que no siente mal al animal.
No es muy frecuente, pero al igual que le puede ocurrir a algunas personas, los perros pueden no tolerar bien el apio.
Los beneficios del apio para los perros
Ahora que sabemos que los perros pueden comer apio, también es importante aclarar cuáles son los beneficios que aporta esta verdura a los perros.
- Puede ser utilizado como snack saludable que sacie el apetito de perros que son muy glotones.
- Ayuda a purificar el organismo, promoviendo la producción de orina. Por tanto, ayuda a eliminar líquidos y toxinas dañinas.
- Tiene ciertas propiedades relajantes por los minerales alcalinos que posee. Es una opción muy natural contra problemas de estrés canino y ansiedad.
- Ayuda a regular el sistema digestivo, alivia el estreñimiento y previene la indigestión.
- Contiene mucha fibra, por lo que es ideal para favorecer el tránsito intestinal.
- Purifica los riñones, por lo que es perfecto para prevenir infecciones del tracto urinario y limpiar los riñones.
- El apio contiene antioxidantes. Eso significa que es ideal para perros de avanzada edad y para prevenir ciertas enfermedades derivadas de un daño oxidativo, como pueden ser la diabetes, las cardiopatías o el cáncer.
¿Qué pasa si mi perro come mucho apio?
Un consumo excesivo de apio en el perro puede provocarle:
Cuando un perro tiene diarrea o vomita, tiende a deshidratarse, algo que se debe evitar. No dejes pasar más de 24 horas si detectas esas señales sin acudir a un centro veterinario.