Consejos para peinar a un perro correctamente
La actividad de peinar a un perro puede ser muy agradable para él o convertirse en una mala experiencia. Para evitar que se dé esa mala situación, es mejor que tengas muy claro cómo peinar a tu peludo: el momento, la manera de hacerlo, el cepillo a utilizar y otros muchos trucos que te contaremos en este post. ¡No te lo pierdas!
Ventajas de peinar a tu perro
Antes de comenzar a explicarte lo que debes tener en cuenta a la hora de peinar a un perro, queremos que sepas por qué es tan importante hacerlo y, por ende, sus ventajas.
- Para empezar, peinar a tu perro va más allá de algo estético. Es una cuestión de higiene. Al peinarlo, eliminas cualquier suciedad que haya adherida a su cabello. Esto ayuda a que tu perro se mantenga limpio sin bañarlo durante más tiempo.
- Además, al pasarle el peine o cepillo eliminas pelos muertos que luego no irán cayendo por casa.
- Si peinas a tu perro con cariño, a este le gustará y lo vivirá como una experiencia positiva que asociará a tu contacto. Esto ayudará también a fortalecer lazos contigo.
- Otra de las ventajas que tiene el momento de peinado es que podrías detectar problemas en la piel de tu mascota si los hubiese.
- También puedes evitar los parásitos o detectarlos si ya los tuviese.
- Y, por supuesto, está la cuestión estética, ya que su pelo lucirá más sano y brillante y su apariencia también lo será.
Peinar a un perro, paso a paso
Y ahora vamos a ver cómo debemos cepillar a nuestro perro, paso a paso.
1. Elige el cepillo o peine correcto
No es recomendable que uses el primer cepillo que encuentres en casa para peinar a tu mascota. Lo mejor es que tengas en cuenta su tipo de pelo.
Seleccionar un peine de cerdas duras puede provocar que, si no eres cuidadoso en el ejercicio de peinado, le hagas daño en la piel.
Si tu perro tiene el pelo corto no va a requerir un gran esfuerzo, así que para ellos lo mejor es un cepillo de goma o de guante.
Por el contrario, si tu peludo es de pelo largo, lo ideal es un cepillo de pin por la forma de los hilos de sus cerdas que además de peinar, eliminan suciedad y pelos muertos.
Por último, encontramos el caso particular de los perros con pelo rizado (como los Caniches o Poodles), que por esas anillas que se forman en todo su cuerpo pueden producirse enredos. Por ello, es necesario que se cepille. En su caso, lo mejor para desenredar son los cepillos de cerdas de metal pero debes ser excesivamente cuidadoso para no hacerle daño.
2. Comienza por el rostro
Tanto si has bañado a tu mascota antes de empezar a peinarla como si no, debes comenzar por su cabecita. Muy cuidadosamente, peina la parte superior de su cabeza. Sigue por detrás de sus orejas con mucho cuidado, manteniéndolas en alto si las tiene caídas.
3. Continua por el lomo
Sigue por el tronco de su cuerpo, empezando desde la parte alta del lomo hacia abajo. Siempre en el sentido del crecimiento del vello.
4. Por último, las partes más delicadas
Las patas y la cola son las partes más delicadas de tu perro y, posiblemente, las que más te cueste peinar. Aun así, debes pasarle el cepillo con cuidado y paciencia. En sus axilas y rabo (si tiene pelo largo) se pueden formar nudos, así que tendrás que deshacerlos con cariño.
¿Como deshago los nudos del pelo de mi perro?
Necesitarás, además del cepillo para peinarlo, un peine finito. Con la punta vete eliminando el nudo poco a poco. Cuando ya lo tengas, peina la zona. Lo mejor es que sujetes el nudo por la raíz para que, si tiras, no le hagas daño al perrete.
La frecuencia
La frecuencia para peinar a un perro dependerá del tipo de pelo. A rasgos generales:
- Pelo largo: si es liso, 3 o 4 veces a la semana; rizado bastará con 2 veces.
- Pelo corto y grueso: 2 veces a la semana.
- Pelo corto y liso: 1 vez a la semana.
- Pelo corto duro: 2 veces a la semana.
Otros consejos para peinar a un perro
1. Establece una rutina
Peinar a tu perro debe convertirse en una rutina más dentro de sus cuidados, especialmente si se trata de un can de pelo largo.
2. Tómatelo con calma
Si acostumbras a tu perro desde cachorro a esta rutina, te costará menos cuando crezca. Aun así, es una tarea que requiere tiempo, así que no lo hagas con prisas, ¡podrías hacer daño a tu mascota!
3. Elige el mejor momento
Esto va ligado al punto anterior: para peinar a un perro debes elegir el momento perfecto. Esto significa que, por un lado, debes tener tiempo para realizar la tarea con calma y, por otro, tu perro debe estar lo más tranquilo posible. Si lo notas inquieto, mejor déjalo para otro momento.
4. Hazlo con comodidad
Si tu perrete es un cachorro lo puedes sentar en tu regazo. Si es adulto y grande, coge una silla para que quedes más o menos a su altura.
5. No grites ni castigues a tu mascota
Si durante el proceso tu perro trata de escapar, morder, etc., ¡no le grites ni castigues! Eso solo hará que asocie el momento del peinado con algo negativo.
6. Premia a tu mascota
El refuerzo positivo es lo mejor en el aprendizaje canino. Si tu perro está comenzando a familiarizarse con el peinado, prémiale cuando acabes si se ha portado bien.