Los americanos son especialistas en hacer de cada evento un espectáculo con ocurrencias de lo más curiosas. Cuando además de divertidas, se crean por una buena causa como el bienestar animal, las apoyamos con creces.
Y es que Puppy Bowl, la versión perruna de la Super Bowl que se celebró el 4 de febrero, tiene como objetivo concienciar a la sociedad sobre la lucha contra el abandono y la adopción animal de cachorros que lo necesitan.
Puppy Bowl: 90 perros traídos de albergues
Puppy Bowl cumple con todas las reglas de la final de la Liga Nacional de Fútbol Americano: carreras, touchdown, cámaras que enfocan a los espectadores, y la actuación tan esperada del descanso. Sin embargo, solo hay una pequeña diferencia: los protagonistas son cachorros.
Ya llevamos viendo a estos pequeños en acción nada más y nada menos que 14 años en la cadena estadounidense Animal Planet. El 4 de febrero, además de ver la esperada Super Bowl, los estadounidenses pudieron ver a 90 perros en acción traídos de albergues de todo el país.
El equipo ‘Fluff’, el ganador del premio
Por segundo año consecutivo, el trofeo ‘Lombarky’ se lo ha llevado el equipo ‘Fluff’. Este grupo de cachorros fue rescatado de Puerto Rico después del huracán Maria.
Pero… ¿Cómo juegan? Las reglas son muy sencillas: se divide a los cachorros en dos equipos, y cada vez que uno de los perros lleva su juguete a la zona de anotación contraria, marca un touchdown.
Para estos animales, la celebración de la Puppy Bowl se convierte en un escaparate al público. Ya sabemos el increíble éxito que tiene la Super Bowl tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo (para los aficionados o no del fútbol americano). Que también se celebre la Puppy Bowl, quiere decir que no solo los americanos pueden verlo, sino el resto del mundo.
Esperamos que este espectáculo sirva de ejemplo para otras medidas que apoyen la adopción animal y que los cachorros de esta edición de la Puppy Bowl consigan una nueva familia.