Sí, los felinos pueden sufrir estrés y los motivos son varios. Por eso, lo mejor es que conozcas los síntomas del estrés en gatos para que puedas ayudar a tu mascota llegado el caso. ¡Te hablamos de ellos!
Síntomas del estrés en gatos
Como en nuestro caso, cuando un gato está estresado es porque su organismo está reaccionando ante algo que siente como una posible amenaza en la estabilidad de su entorno. Y teniendo en cuenta que los gatos son muuuuy territoriales, no es de extrañar que sufran estrés por cualquier mínimo cambio en su hábitat.
Los síntomas más comunes del estrés en gatos son:
1. Trastornos en la alimentación
Si tu gato deja de comer, puede ser un síntoma de estrés. Aunque puede darse el caso contrario: que tu gato engulla todo lo que pille, que le siente muy mal y acabe vomitando.
2. Infecciones
Cuando un gato está estresado, libera muchísimas hormonas que generan una reacción negativa hacia los glóbulos blancos, afectando al sistema inmunológico del animal. Esto provoca que sus defensas bajen y las infecciones aparezcan con mayor facilidad.
3. Marcaje
Si tu gato siente que está perdiendo el dominio de su territorio, intentará dejar más claro que nunca quién manda en él.
Para ello puede empezar a hacer sus necesidades fuera de la bandeja de arena o arañar todo lo que encuentre a su paso.
4. Ansiedad
El estrés puede provocar en tu gato ansiedad y que esta se traduzca en una actitud compulsiva. Una de las más evidentes es lamerse sin parar.
Además, el gato puede presentarse más asustadizo de lo normal.
5. Caída de pelo
Como dijimos antes, el estrés genera la liberación de unas hormonas que alteran el organismo y afectan a la salud del gato. La alopecia es otra de las consecuencias de este problema.
6. Agresividad
Si tu gato se muestra más agresivo de lo normal, puede estar pasando por un episodio de estrés.
Las actitudes en las que se refleja son que tu gato bufa constantemente, muerde, se le eriza el pelo del lomo, te mantiene la mirada con las pupilas dilatadas, huye cuando te acercas y araña.
Aunque estos sean los síntomas más frecuentes del estrés en gatos, debes saber que también pueden ser síntomas de otras enfermedades, por lo que ante cualquiera de ellos, debes acudir al veterinario.
¿Por qué mi gato está estresado?
Como explicamos al principio, los motivos que causan el estrés en gatos son múltiples. Algunos son:
- Las mudanzas
- Las visitas
- Las salidas al veterinario
- Los viajes
- El cambio de muebles
- La llegada de un nuevo miembro de la familia
- La llegada de otro animal a casa
- Los ruidos fuertes
- Tener las uñas muy largas
Algunos gatos pueden llevar bastante bien estas situaciones, pero no es el caso de todos.
Por eso, es necesario que, si eres consciente de que se va a producir una de estas situaciones, ayudes a tu mascota a llevarla de la mejor forma posible.
Por ejemplo, haz que la llegada de otro animal a casa se produzca poco a poco y no de golpe o premia a tu gato cuando vayáis al veterinario. ¡Y cuida y mima a tu gatito siempre! No le castigues si lo hace mal, ¡ayúdale a superar su estrés!
