La neumonía en gatos es una enfermedad pulmonar bastante frecuente que podría afectar a tu mascota. ¡Es muy importante permanecer atento a posibles síntomas o cambios de comportamiento! Aunque es cierto que no es fácil, los gatos son genios disimulando sus enfermedades. Por eso, cuanto más sepas sobre la neumonía, ¡mejor!
Qué es la neumonía en gatos
La neumonía es una enfermedad que afecta a los pulmones. En concreto, es la inflamación de los alvéolos pulmonares y puede ser realmente peligrosa, ya que si la hinchazón es grave resulta mortal, además de muy dolorosa. Además, la neumonía puede contraerse en paralelo a otras enfermedades y es realmente contagiosa.
Cuando el gato tiene neumonía, el malestar y el dolor hacen que tenga inapetencia, por lo que puede negarse a comer y beber agua. Esto hace que el riesgo de morir sea mayor.
La neumonía puede afectar a cualquier gato, pero los más vulnerables son los cachorros, los ancianos y los callejeros.
Causas de la neumonía en gatos
Las causas de la neumonía en gatos son muy variadas, pero una de las más comunes es una infección bacteriana, especialmente el calicivirus felino. Afecta a las vías respiratorias y puede extenderse y afectar a los pulmones si no se trata debidamente.
Sin embargo, la presencia de objetos extraños en las vías respiratorias o una nutrición deficiente, el estrés o los cambios bruscos de temperaturas y corrientes también pueden ocasionar una enfermedad como la neumonía en los gatos. Otras enfermedades, como la leucemia, hacen que los gatos tengan el sistema inmunológico muy débil y sean proclives a desarrollar neumonía.
Qué tipos de neumonía felina hay
No todas las neumonías en gatos son iguales, hay dos tipos diferenciados:
- Pulmonía por inhalación: ocasionada por la presencia de un objeto extraño en las vías respiratorias. Se suelen administrar antibióticos y oxígeno para ayudarle a respirar.
- Pulmonía bacteriana: debido al contagio del algún hongo o bacteria, se acumula líquido en los alvéolos y los pulmones. Las bacterias van proliferando y pueden dar lugar a pus si no se trata a tiempo.
¡Ambos tipos de neumonía en gatos necesitan atención urgente o pueden poner en serio peligro su vida!
Síntomas de la neumonía en gatos
Los síntomas típicos de la neumonía son:
- Estornudos
- Tos
- Estado de letargo
- Dificultad para tragar, por lo que el gato no quiere comer
- Fiebre
- Piel de tonalidad azul
- Silbido o ronquido al respirar
- Respiración acelerada y entrecortada
- Pérdida de peso
Si observas estos síntomas en tu gato, ¡debes acudir a tu veterinario lo antes posible! No dejes que pase el tiempo o empeorará.
Tratamiento de la neumonía en gatos
Para determinar si tu gato tiene realmente neumonía, el veterinario realizará pruebas; las radiografías ayudarán a revelar el estado de su tórax y pulmones. Además, puede realizar extracción de líquidos para su estudio o análisis de orina.
Si el diagnóstico se confirma, lo más seguro es que hospitalicen a tu gato unos días y lo traten con penicilina o amoxicilina, además de administrar diuréticos para favorecer la eliminación del líquido acumulado.
Cuando vuelva a casa, es importante seguir cuidándolo. Es esencial que se mantenga bien hidratado, así que debes asegurarte de que bebe suficiente agua. Si se niega a comer, prueba con la comida enlatada temporalmente, suele motivarles más.
Por otra parte, es importantísimo que no se exponga a cambios de temperatura bruscos, corrientes de aire ni situaciones de estrés. ¡Dale todo el bienestar posible! Si tienes más gatos, debes aislarlo para que no les contagie la neumonía.
Por supuesto, debes seguir todo el tratamiento farmacológico y los consejos que te dé el veterinario para que se recupere por completo. ¡Nunca mediques a tu mascota por tu cuenta!
Si crees que estás ante un caso de neumonía en gatos, ¡reacciona cuanto antes! Tu amigo necesita tratamiento urgente.