Si has observado que tu perro sacude mucho la cabeza, este gesto puede deberse a razones muy diferentes. Puede no ser un problema grave, pero conviene prestar atención. En el peor de los casos, podría tratarse a un dolor en los oídos, y en este caso habría que intervenir urgentemente para evitar complicaciones.
Los problemas de oído en los perros pueden venir de diferentes causas, como el exceso de humedad en los perros de orejas largas, que además de ser un cúmulo de bacterias, impiden la correcta ventilación del oído. De esta manera, se generan infecciones y otitis. Por ejemplo, estas afecciones son muy comunes en los perros cocker, debido a sus particulares y grandes orejas.
Por qué mi perro sacude mucho la cabeza
(Foto via: misanimales)
Es normal que los perros de pelo largo produzcan una gran cantidad de cerumen. Si no se elimina con frecuencia, este exceso puede provocar otitis. Para evitarlo, es importante eliminar el pelo de sus canales auditivos.
Por otro lado, algunos perros tienen tendencia a las pieles seborreicas, cuando esta y su pelo son demasiado grasos.
Menos probable, pero también posible es que si has visto que tu perro sacude mucho la cabeza sea porque tiene algo metido en su oído. ¿Tiene acceso a un jardín con maleza o zonas de campo? Quizás alguna espiga haya entrado en su oído y le esté molestando.
En este caso, sentirá mucho dolor y es relevante que acudas al veterinario urgentemente para que saque de su canal auditivo lo que sea que le esté causando malestar.
Si tienes niños, procura que siempre jueguen con tu perro bajo vigilancia. Sin querer, podrían introducir en su oído juguetes o pequeños objetos, o dañarle con ellos.
Cómo cuidar y limpiar los oídos de mi perro
Lo ideal para la limpieza de los oídos de tu perro es el algodón, ya que el cerumen se adhiere a él con facilidad. Las gotas para los oídos son también una buena opción, siempre y cuando no sean irritantes y hayas consultado al veterinario. Él sabrá indicarte la posología y periodicidad de las aplicaciones para la correcta higiene de tu mascota.
Cuando bañes a tu perro, es importante evitar que entre agua en sus canales auditivos, ya que esto es muy molesto y además podría causar infecciones. Con cuidado, tapa sus oídos con dos bolitas de algodón; procura no meterlas demasiado en el oído ni presionarlas, basta con que impidan la entrada del agua. Al terminar el baño, asegúrate de retirarlas de ambos oídos.
He visto que mi perro se sacude mucho la cabeza, ¿qué puedo hacer?
Ante cualquier molestia, el perro puede mover la cabeza de forma anormal para intentar desprenderse del agente externo que le causa dolor. Si ves que tu perro mueve bruscamente su cabeza, reacciona cuanto antes para solucionar el problema; si dejas que lo haga, podría lesionarse (daños en el cuello, rotura de los vasos sanguíneos de los oídos…).
Movimiento natural de la cabeza del perro
(Foto via: animalmascota)
Ahora te preguntarás: mi perro sacude la cabeza, ¿cómo sé si es un movimiento normal o causado por un problema?
En muchas ocasiones, los perros mueven la cabeza como parte de su comunicación no verbal, expresándonos atención, reacciones, sobre todo cuando hablamos con ellos. Esto se debe a que quizás no ha entendido bien lo que decíamos y mueven su cabeza para dirigir mejor sus orejas al sonido. Otras veces, por el contrario, mueven la cabeza al reaccionar ante palabras clave que les son conocidas, especialmente si las relacionan con algo positivo, como “premio” u “hola”. Estos movimientos son completamente normales y no suelen ser bruscos, sino fluidos, además de algo puntual.
Una sacudida de cabeza por molestia en los oídos debería ser algo forzado y persistente, seguramente llamaría tu atención. Si observas que tu perro sacude su cabeza de forma inusual o que se rasca intentando sacar algo de sus oídos, presencia de sangre en el canal auditivo o cualquier otra señal, no dudes en acudir al veterinario cuanto antes. Un diagnóstico correcto y temprano facilitará mucho la extracción del objeto, si es que lo hay, y el tratamiento de síntomas, como dolor, picor, irritación, etc.