El loro aguileño, cuyo nombre científico es Psittrichas fulgidus, no es de los loros más conocidos. Eso sí, su aspecto no deja indiferente a nadie. Por eso, ¡nos encantaría que le conocieras un poco a través de nuestro artículo!
Características físicas del loro aguileño
También conocido como loro de Pesquet, se trata de la única especie existente del género conocido como Psittrichas.
No es de extrañar que sea un ave desconocida, ya que esta solo vive entre las selvas montañosas de Nueva Guinea. Es decir, es endémica de este lugar.
Su tamaño suele rondar los 45-46 centímetros de longitud y su peso oscila entre los 680 y los 800 gramos.
Su plumaje es muy característico. Para empezar, carece de plumas en el rostro, lo que hace que el tamaño de su cabeza parezca realmente más pequeña que la de otros loros.
Además, su pico en forma de gancho nos puede recordar a un buitre o águila, de ahí su nombre.
Pero hay otro apodo por el que se conoce al loro aguileño o loro de Pesquet: loro Drácula. ¿Qué por qué? Se debe al color de su plumaje.
Este es, predominantemente negro, con algunos finos toques grises en los bordes de su pecho. Sin embargo, todo ello contrasta muchísimo con el rojo escarlata de la parte frontal de las alas, el vientre y la parte alta de la cola. ¿Esto no os recuerda al ropaje del famoso vampiro? ¡Para muchos así es!
Pero volviendo a su color, una forma de distinguir a un loro aguileño macho de una hembra es fijarnos en sus ojos. En los machos adultos suele aparecer una mancha pequeña roja tras ellos.
Alimentación del loro aguileño
Los frugívoros son aquellas especies que se alimentan total o parcialmente de frutos.
Pues bien, este loro se considera frugívoro, ya que su dieta se compone, principalmente, de higos. También pueden alimentarse de flores y de néctar.
Pero sinceramente, su dieta no es muy variada, como puede ser la alimentación de otro tipo de loros.
Una curiosidad: se dice que el que tengan el rostro desnudo de plumas es una característica adaptativa. Dado que los alimentos que consumen son bastante pegajosos, esa falta de plumas facilita que no se le queden los restos de fruta pegados, ensuciando y enmarañando su rostro.
Hábitos del loro de Pesquet
Dado que su alimentación es muy simple, no les hace falta migrar.
Sin necesidad de salir de las selvas montañosas de Nueva Guinea, el loro aguileño se mueve solo un poco, estacionalmente, en busca de frutos.
El loro aguileño suele reunirse en grupos de entre 10 y 20 miembros para descansar juntos en los árboles, en alturas de entre 600-1200 metros, pero también se les ha visto de 2 en 2.
No hay excesiva información sobre su reproducción, pero se sabe que solo ponen uno o dos huevos de una vez en huecos de árboles muy grandes.
Por desgracia, el loro de Pesquet es víctima de la caza furtiva, ya que su plumaje es muy apreciado por coleccionistas.
Esto, unido a la destrucción de su hábitat, ha hecho que entre en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y que su número esté en descenso.
Se calcula que el número total de este loro ronda los 42.000 ejemplares.
¡Esperemos que los trabajos de conservación den sus frutos y no desaparezca!
Foto de portada vía Wikipedia