El hámster dorado es uno de los más abundantes en las casas que eligen a este pequeño roedor como mascota, aunque cada vez es más complicado encontrarle en su hábitat natural. ¿Quieres descubrir a este adorable hámster? Si estás pensando en tener alguno, sigue leyendo y descubre sus características y necesidades.
Características del hámster dorado
El hámster dorado es notablemente más grande que otros de su especie, como el chino o el roborowski. Pesan entre 90 y 150 gramos y suelen medir unos 13 – 15 cm, aunque a veces llegan a los 17.
Su pelaje es color dorado y puede ser corto o largo, aunque en el segundo caso se le conoce como hámster de Angora. ¡No es una raza diferente, sino una variedad del dorado! Suele ser dorado intenso por el lomo y más claro en el vientre; debido a diferentes cruces, se pueden encontrar hámsters de otros colores, como negros, rojizos, blancos, grises o marrones.
Tienen unas bolsas entre las mejillas y los hombros llamadas abazones que utilizan para guardar comida.
Temperamento del hámster dorado
Hay muchos hámsters juguetones y sociables, pero el hámster dorado es más bien tímido, reservado y algo solitario. Puede ser algo agresivo si se le fuerza a jugar o es manipulado y no se siente cómodo, o si se le obliga a convivir con otros hámsters en la misma jaula.
Sin embargo, en condiciones normales no son agresivos con las personas, de hecho, no suelen morder. Por supuesto, antes de poderlo coger y tocar sin que reaccione mal, igual que cualquier otro animal, deberá habituarse al contacto con nosotros; esto lleva algo de tiempo. Darle alimentos con la mano puede ayudar a que gane confianza en ti, pero no quieras ser invasivo ni hacerlo demasiado rápido o se asustará.
Cuidados del hámster dorado
Alimentar a un hámster es muy sencillo. Tienes que buscar un pienso específico para estos animales, que consta de semillas y cereales. Esta será la base de su alimentación, que hay que complementar con frutas y verduras frescas, como pera, manzana, brócoli, pimientos… Por otro lado, necesitan proteína en cantidades moderadas, que puedes conseguir dándole pavo, queso sin sal, papilla insectívora…
Nunca olvides que debe tener agua fresca a su disposición en todo momento.
Por otra parte, la jaula es muy importante; cuanto más espaciosa sea, mejor. Ten en cuenta que si vas a tener varios hámsters tendrás que aumentar la jaula en consecuencia.
Necesitará un fondo impermeable cubierto de grava y posibilidades de realizar ejercicio: jaula de varios pisos o una rueda para poder correr. Además, un nido donde se sienta seguro para dormir.
Es muy importante mantenerla bien limpia. Tendrás que desinfectarla al menos una vez a la semana y cambiar el grano del fondo. Retira cada día los restos de comida que escondan por ahí.
Salud del hámster dorado
Los problemas que más a menudo afectan a los hámsters son:
- Golpe de calor: evítalo colocando la jaula en un lugar fresquito y seco, alejado de luz directa y fuentes de calor.
- Resfriados y neumonías: tampoco pongas la jaula en lugares muy fríos o donde le den corrientes de aire.
- Pulgas, piojos y otros parásitos: existen antiparasitarios para hámsters, ¡úsalos!
- Heridas y fracturas: si son leves se suelen curar solas, pero puede ser necesario acudir al veterinario si son graves.
Nunca saques de la jaula al hámster si no vas a poder vigilarlo mientras está libre y no lo subas a sitios altos, ¡podría caerse!
Tener un hámster como mascota es fácil, barato y divertido. Es ideal si es la primera vez que vas a cuidar de un animal. ¿Te animas a tener un hámster dorado?