La ceguera puede afectar a tu gato, bien por una enfermedad o lesión o porque, con el paso de los años, su capacidad visual disminuya. El caso es que eso no significa que tu felino no pueda continuar teniendo una vida tranquila y feliz, pero está claro que tú debes ayudarle para que lo consiga. Por ello, te invitamos a tomar nota de los cuidados de un gato ciego más importantes.
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Causas de la pérdida de visión en los gatos
Antes de hablar de los cuidados que deberías brindarle a un felino con escasa visión, lo mejor es que aclaremos cuáles son las posibles causas de este hecho. Entre las más comunes se encuentran:
- Traumatismos: pueden causar la pérdida del ojo o daños en el mismo.
- Cataratas en gatos: puede ser congénita o adquirida. Se produce un enturbiamiento del cristalino y la luz ya no llega hasta el fondo del ojo.
- Desprendimiento de retina: una de las causas principales es la hipertensión arterial.
- Uveitis: consiste en una inflamación dentro del ojo.
- Por degeneración de la retina.
- Glaucoma: aumento de la presión interna del ojo a causa de que el humor acuoso del mismo ya no puede expulsarse.
- Enfermedades que supongan la extracción del ojo, como podría ser un cáncer.
Cuidados de un gato ciego
Un gato que ha perdido la visión puede continuar teniendo una vida feliz. Normalmente, cuando un animal pierde uno de sus sentidos principales, los demás se le agudizan. Por tanto, si tu gato se queda ciego, su olfato y su oído se desarrollarán más para compensar esa pérdida.
Si además de esto, tú pones de tu parte para hacerle la vida más fácil, no habrá grandes problemas para él. Toma nota de estos consejos para lograrlo.
1. Ayuda a establecer su mapa mental y respétalo
Los bigotes de los gatos ayudan a estos animales a controlar el espacio y no chocar con los objetos, incluso cuando están ciegos o no hay oscuridad. Sin embargo, aunque cuenten con esta herramienta, lo ideal es que les ayudes a crear un mapa mental del espacio, teniendo en cuenta estos aspectos:
- Mantén tu vivienda recogida, libre de obstáculos, sobre todo por las áreas por las que se mueva el gato. Por ejemplo, no dejes cajas, zapatos o juguetes tirados por el suelo.
- No cambies ni muevas los muebles de sitio.
- No cambies tampoco de sitio su comedero y bebedero.
- Tener la televisión o la radio encendida puede ayudar al felino a orientarse cuando está solo en casa.
Es muy importante no mover al animal de sitio y ponerlo en otra área porque le confundirá, causándole muchísimo estrés. Piensa que si los cambios ya le suponen mucha ansiedad, el hecho de que no pueda ver puede incrementarla.
2. Protégelo de los peligros
Otro de los cuidados para un gato ciego es la protección frente a los peligros.
Existen muebles con esquinas muy puntiagudas que pueden causar muchísimo daño al animal, así que lo ideal es protegerlas con protectores acolchados.
También es fundamental vallar o limitar aquellas zonas que pudiesen resultar peligrosas para tu gato, como escaleras, balcones, terrazas, piscinas, jacuzzis, etc. Hasta mantener la tapa del inodoro cerrada es relevante.
Por supuesto, asegura puertas, ventanas y balcones para que el gato no pueda perderse o caerse.
3. Facilita ciertos accesos
Al contrario de lo dicho en el punto anterior, hay ciertos lugares u objetos a los que el gato debe acceder con facilidad, como son su cama, bandeja de arena, comedero y bebedero.
Si además la zona de reposo del animal está en un punto elevado, facilítale que llegue a la misma instalando una rampa, por ejemplo.
4. Dales confianza y tranquilidad
Otro de los cuidados de un gato ciego está directamente relacionado con tu manera de interactuar con él.
Por ejemplo, es esencial que le hables continuamente para que pueda ubicarte, pero siempre con voz suave para que no se asuste.
Si te vas a acercar a él, debes ir hablándole de camino para que no le pille por sorpresa, especialmente si está reposando. De no ser así, podría ponerse a la defensiva y arañar o atacarte.
Antes de coger a tu mascota en brazos, es recomendable acariciarle para que sepa que estás cerca.
Además, evita en todo momento los sonidos muy fuertes cerca de él.
5. Proporciónale refugios
Cuando un felino se asusta o se siente estresado o amenazado, huye a esconderse. Lo sabrás de sobra. Pues bien, un gato ciego requiere también de refugios que le ayuden a tranquilizarse cuando lo necesite.
Por ello, lo ideal es que cuente con uno en cada estancia de la casa, para hacerle más fácil llegar al más cercano en el momento que lo necesite. Piensa que si le cuesta encontrarlo se puede hacer daño en su búsqueda y/o alterarse aún más.
6. Limita sus salidas
Si tu felino ha perdido por completo su visión, no es aconsejable que salga de casa sin vigilancia. Esto podría ser verdaderamente peligroso.
En caso de que la pérdida sea parcial, entonces puede salir (si es cerca de casa), pero con limitaciones.
7. Compensa sus escasas salidas
Otro de los cuidados de un gato ciego es compensar, dentro del hogar, esa escasa estimulación que van a obtener del exterior al salir menos.
Para ello, aumenta su número de juguetes y rascadores. De hecho, algunos de esos juguetes deben incluir algún tipo de sonido para que sean más entretenidos ante su nueva situación. Además, le debes dar más importancia que nunca a jugar con tu gato.
8. Identifica al felino
Aunque los collares para gatos no siempre son aconsejables, en caso de que tu mascota sea ciega, lo ideal es que lo lleve con una chapa identificativa.
En esa chapa, es importante que aparezca tu contacto, por si se pierde y alguien lo encuentra desorientado, y siempre que sea posible, especificar que es ciego.
Síntomas de un gato ciego
Ya hemos visto cuáles son los cuidados de un gato ciego más considerables, pero, ¿cómo puedes saber que lo está?
Además de la confirmación veterinaria y de que algunos signos físicos son muy evidentes (como tener los ojos enturbiados), hay otras señales:
- El animal choca con objetos.
- Se tropieza con los peldaños.
- Ya no está tan activo y no trepa a lugares altos.
- Si le tocas sin hacer un sonido previo se asusta muchísimo a pesar de estar despierto.
- Puede tener las pupilas muy dilatadas o desprender secreciones purulentas por los ojos.
En caso de detectar estos síntomas o tener sospecha de que se ha producido ceguera en tu gato, no dudes en acudir al veterinario.
Por último, queremos recordarte que las capacidades adaptativas de los animales en lo que a pérdida de sentidos se refiere son bastante sorprendentes, por lo que aunque te resulte triste que tu gato no vea bien, si le ayudas, para él no supondrá un grave problema.