Si tienes un gato, seguro que sabes que a veces es imprescindible viajar en coche con un gato. Viajar, ir al veterinario, visitar a un amigo…¡Hay muchísimas situaciones donde vamos a necesitar hacerlo!
Seamos sinceros… Los gatos no disfrutan saliendo de tu hábitat natural, y si lo hacen, tienden a estresarse. ¡Tranquilo! En Wakyma te lo contamos todo, para que tu gato viaje en coche contigo sin problemas.
Acostumbrar a un gato a viajar en coche
Intentar acostumbrar a tu mascota a viajar en coche desde pequeño, ¡es un consejo que puedes aplicar a prácticamente cualquier especie animal! Aunque ciertamente a veces es imposible, ya que también se adoptan animales adultos. No obstante, ¡no desesperes! Educar a una mascota es fundamental.
Si hablamos de los gatos, estos no soportan los cambios. Por lo que si les trasladamos a un pequeño habitáculo (como un transportín), se estresarán. No obstante, si tu gato aún es pequeño, puedes usar algunos trucos para acostumbrarle. ¡Sigue estos pasos!
- Mete a tu cachorro en el transportín, intenta que este tenga una almohadilla, ¡así estará más cómodo!
- Subiros al coche y conducir durante 5 minutos.
- Antes de dejarle salir del transportín, ¡dale un premio!
No olvides repetir este mismo procedimiento tantos días necesite tu gato para estar relajado en el coche. ¡También te servirá para que tu gato no asocie el coche con el veterinario!
Consejos para viajar en coche con un gato
Como comentábamos, intentar acostumbrar a tu gato desde que es un cachorro, ¡es la mejor opción! Pero… Qué pasa cuando hemos adoptado un gato adulto y no tenemos esa posibilidad. ¡No desesperes! Con estos consejos, ¡lo lograrás!
- Evita dar a tu gato comida durante las 2 horas anteriores al viaje. De esta forma evitarás que la vomite.
- Usa un transportín para gatos seguro y fijo. Así evitarás posibles mareos y/o accidentes.
- No saques a tu gato del transportín durante el viaje.
- Ofrécele su juguete favorito.
- Dale una caricia de vez en cuando.
Recuerda que en España, no es habitual que los gatos paseen por la calle. No obstante, si tu gato te hace caso, le sacas a pasear con frecuencia. ¡Puedes sacarle a estirar las patas! No obstante, no te olvides de extremar la precaución, ¡podrían atropellarle!
En el caso anterior, y si tu gato no se marea, no dudes proporcionar a tu gato comida y agua.
Con cariño y diversión el viaje con tu gato, ¡será todo un éxito! Lograrás que tu gato esté receptivo a viajar en coche, y lo vea como algo divertido.
Casos difíciles para viajar con tu gato
Si tu gato se marea y sufre, ¡viajar con el será más complicado! Lo mejor que puedes hacer en ese caso, es llevarle al veterinario, para que le recete algún medicamento, y pueda estar más tranquilo.
No fuerces a tu gato, y busca ayuda profesional.