La trombocitopenia inmune es una patología que se caracteriza por una disminución de las plaquetas en la sangre de quien la padece. En este caso nos vamos a centrar en la trombocitopenia inmune en perros, hablándoos de sus causas, síntomas, diagnóstico y cómo puede tratarse.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
¿Qué es la trombocitopenia inmune en perros?
La trombocitopenia inmune en perros es una condición en la cual el sistema inmunológico del animal ataca y destruye sus propias plaquetas.
Las plaquetas son las células sanguíneas responsables de la coagulación. Cuando su número disminuye, los perros se vuelven propensos a sufrir hemorragias.
Aunque las causas exactas de esta enfermedad no están completamente comprendidas, se cree que factores genéticos y ambientales pueden desempeñar un papel en su desarrollo. Además, la trombocitopenia inmune puede ser aguda o crónica, dependiendo de la duración y gravedad de la enfermedad.
Veamos todas sus características con detalles.
¿Qué causa la trombocitopenia inmune en perros?
Lo más habitual es que la trombocitopenia inmune en perros aparezca sin causa aparente. Es decir, que lo común es que se trate de una trombocitopenia inmune idiopática o primaria.
Sin embargo, existen algunas teorías que sugieren posibles factores desencadenantes. Entre esos factores se encuentran:
- Trastornos autoinmunes.
- Enfermedades inflamatorias o infecciosas, como la ehrlichiosis canina.
- La exposición a ciertos medicamentos y toxinas.
- Predisposición genética.
- En algunos casos, la enfermedad puede ser secundaria a otras condiciones subyacentes, como el cáncer o enfermedades del sistema inmunológico.
Síntomas de la trombocitopenia inmune canina
Esta enfermedad puede manifestarse en nuestros peludos a través de una variedad de síntomas, que pueden evolucionar en su gravedad.
Algunos de los signos frecuentes que pueden indicar la presencia de esta condición son:
- Hemorragias. Los perros con trombocitopenia inmune son propensos a presentar hemorragias en las encías, nariz, tracto gastrointestinal e incluso bajo la piel en forma de hematomas. Estas hemorragias pueden ocurrir de forma espontánea o como resultado de una lesión menor.
- Fatiga y debilidad. La disminución de las plaquetas en la sangre puede afectar a la capacidad de coagulación del perro, lo que puede llevar a una mayor pérdida de sangre en caso de lesiones o hemorragias. Esto puede resultar en fatiga y debilidad generalizada en el perro afectado.
- Apatía y anorexia en el perro. La debilidad también puede transformarse en apatía y disminución del apetito en el animal.
- Hematuria (sangre en la orina o heces). La disminución de las plaquetas puede causar sangrado en el tracto urinario o gastrointestinal, lo que se manifiesta como sangre visible en la orina o heces.
- Incremento de la frecuencia respiratoria y cardiaca. El incremento de la frecuencia respiratoria y cardiaca en perros puede ser un signo de trombocitopenia inmune debido a la posible presencia de sangrado interno. Eso puede resultar en una disminución del número de plaquetas y un mayor esfuerzo del organismo por compensar la pérdida de sangre.
Diagnóstico de la trombocitopenia inmune en perros
Para poder tener un diagnóstico certero de la patología, un veterinario tendrá que realizar una evaluación exhaustiva.
Para ello, se llevarán a cabo diferentes pruebas y análisis, como por ejemplo:
- Hemograma completo. Esta prueba de laboratorio que evalúa los diferentes componentes de la sangre, incluyendo el número de plaquetas. En perros con trombocitopenia inmune, se observará una disminución en la cantidad de las mismas.
- Examen de médula ósea. En algunos casos, el veterinario puede recomendar un examen de médula ósea para obtener más información sobre la producción de plaquetas en el perro. Este procedimiento puede ayudar a descartar otras posibles causas de la trombocitopenia y confirmar la presencia de la enfermedad.
- Pruebas adicionales. Dependiendo de la situación individual del perro, el veterinario puede solicitar pruebas adicionales para descartar otras enfermedades subyacentes que puedan estar causando la trombocitopenia. También para evaluar la función de coagulación. Esto puede incluir:
- Análisis de sangre con el fin de detectar enfermedades infecciosas.
- Pruebas específicas para evaluar la capacidad de coagulación de la sangre.
Tratamiento de la trombocitopenia inmune en perros
A la hora de establecer el tratamiento de la trombocitopenia inmune en perros, habrá que evaluar la gravedad de la enfermedad y las necesidades individuales del animal.
Basándose en eso, el profesional veterinario propondrá algunas de estas opciones de tratamiento:
Medicamentos inmunosupresores
Se pueden administrar medicamentos, como los corticosteroides (por ejemplo, prednisona), para suprimir la respuesta inmunológica y reducir la destrucción de las plaquetas.
Estos medicamentos ayudan a estabilizar los niveles de plaquetas en la sangre y controlar los síntomas de la enfermedad.
No obstante, en ciertos casos pueden ser necesarios medicamentos inmunosupresores más potentes.
Transfusiones de sangre
En casos graves de trombocitopenia inmune en perros, puede ser necesario realizarles transfusiones de sangre para elevar rápidamente los niveles de plaquetas y controlar las hemorragias.
Estas transfusiones pueden provenir de donantes de sangre canina o de bancos de sangre especializados.
Cambios en la dieta y en el cuidado del animal
Para algunos perros con trombocitopenia inmune, puede ser beneficioso aplicar un cambio en su dieta. Además, otros cuidados para reducir el estrés y promover una mejor salud en general también pueden ser favorables.
Esto puede incluir una alimentación equilibrada y adecuada, junto con un entorno tranquilo y relajado que minimice los factores desencadenantes de estrés
Recordemos que el tratamiento de la trombocitopenia inmune en perros SOLO debe ser establecido y controlado por un veterinario, estando este adaptado a las necesidades individuales de cada peludo.
¿Cuál es el pronóstico la trombocitopenia inmune canina?
El pronóstico de la trombocitopenia inmune en perros varía según la gravedad de la enfermedad y la respuesta individual al tratamiento.
Algunos canes pueden tener remisiones espontáneas, mientras que otros pueden requerir un manejo y tratamiento a largo plazo.
Es importante seguir las recomendaciones del veterinario y realizar controles regulares para monitorear la salud de la mascota afectada.
