El mundo animal nunca deja de sorprender, ¡siempre hay alguna nueva especie que descubrir! Uno de los últimos hallazgos ha sido un pez sin cabeza. ¡Tal cual te lo contamos! Te hablamos de este… ¿particular? pez que ha aparecido en las costas australianas.
Aparece un pez sin cabeza en los mares de Sidney
No era más que una expedición rutinaria, pero encontraron algo que no esperaban: unos científicos avistaron algo que les llamó la atención y que resultó ser un extraño pez del que no se sabía nada desde 1873. Pero es que hay más, esa no es la única sorpresa… ¡es un pez sin cabeza!
Los responsables de este hallazgo fueron unos científicos del museo Victoria y el CSIRO (Australian’s Government Commonwelth Scientific and Industrial Research Organisation). Este raro espécimen apareció a más de 4 km de profundidad en una costa del sur de Sidney.
El líder de la expedición marina, el Doctor Tim O’Hara, afirma que se trata de un pez muy particular, ya que es imposible distinguir su boca, ojos y branquias. ¡No tiene! Más que una cabeza, parece que tuviera dos traseros. No es la primera vez que se encuentra este animal; ya se sabía de su existencia, sólo que no se había vuelto a ver desde hace casi siglo y medio, cuando se capturó uno en Nueva Guinea.
Exitosa expedición con montones de descubrimientos
El descubrimiento accidental de este pez sin cabeza no fue el único éxito del equipo del Doctor O’Hara, en el que también se han registrado espectaculares estrellas de mar bioluminiscentes, cangrejos de colores brillantes y gigantes arañas marinas del tamaño de un plato.
Aunque dicen que ninguno de los otros avistamientos ha sido tan espectacular como el del pez sin cabeza, reconocen felizmente que se ha tratado de un viaje lleno de descubrimientos que enriquecerán las investigaciones científicas de los próximos años. Han encontrado muchos animales marinos que nadie conocía hasta ahora.
¿Cuántas especies animales habrá de las que aún no sabemos nada? Tendremos que esperar para irlos descubriendo mientras la maravillosa ciencia sigue su curso. ¿Qué opinas del pez sin cabeza?