Existen muchas razas de gatos bellas y sorprendentes, pero hay una de ellas que destaca por muchos motivos. El principal es que es un gato que ha sido creado en un laboratorio y es considerado el más grande y caro del mundo. Se trata de la raza de gato Ashera y te vamos a hablar sobre ella.
El origen de la raza de gato Ashera
Este impresionante felino nació en los laboratorios de la empresa norteamericana Lifestyle Pets, allá por el año 2003. Sí, es un gato creado por la mano del hombre, con una genética manipulada y donde intervinieron ejemplares de gato común, leopardo asiático y serval africano.
Es una raza completamente exclusiva, que solo se da en dicho laboratorio. Y es que una de las características más sorprendentes es que este gato es estéril. Así sus creadores se aseguran de que no nacerán crías fuera de sus instalaciones y siguen teniendo la exclusividad. Solo nacen unos 100 ejemplares por año.
Un precio astronómico
Como todo lo exclusivo, tener un ejemplar de la raza de gato Ashera no está al alcance de todos.
El gato Ashera Standard, de cuyas características hablaremos más adelante, cuesta la friolera de 17 mil euros. Y a partir de ahí, el precio sube.
Y es que la empresa, en su afán de jugar a ser como la madre naturaleza, ha desarrollado otras variedades dentro de la raza, que por sus peculiaridades hacen que sean aún más caras.
Por un lado está el Ashera Hipoalergénico, sí, para que aquellos que sufren alergia a los felinos puedan tenerlo como mascota si pagan 18000 euros por él. Por otro lado, encontramos el impresionante Snow Ashera, parecido a un tigre blanco moteado, cuyo precio asciende a 50000 euros. Pero la joya de la corona, o más bien la corona en sí, es el Royal Ashera, de 96000 euros.
El animal lo entregan vacunado y con microchip, con un certificado que acredita su autenticidad, un seguro y asesoramiento continuo sobre su conducta y cuidados.
Características de la raza de gato Ashera Standard
Si tenemos en cuenta lo que hemos mencionado en el apartado anterior, no es de extrañar que sea considerado el gato más caro del mundo, pero también se lleva el premio al más grande. Este felino doméstico puede alcanzar 1,30 m de largo y pesar entre 12 y 15 kilos.
Su cuerpo está cubierto por un pelaje igual al de un leopardo y posee unas orejas puntiagudas. A pesar de esa apariencia física tan imponente se trata de un gato bastante dócil, cuyos cuidados no difieren demasiado de los de cualquier otro gato.
Básicamente la principal diferencia es que necesitan más cantidad de comida dado su tamaño, pero la alimentación es la misma.
Son animales bastantes tranquilos, inteligentes y solitarios a los que les gusta la paz del hogar. Sin embargo, como cualquier otro gato, también necesitan mimos, que pases tiempo con él, juguetes y rascadores.
Aunque no es normal pasear a un gato, si se le acostumbra desde cachorro, el gato Ashera puede salir a la calle con correa.
Sin embargo, como su creación es tan reciente, aún se están investigando las posibles enfermedades que podría desarrollar el felino. ¡Todavía queda mucho que descubrir de la raza!
No vamos a entrar en debates morales sobre si la creación de un animal es correcta o no. Cada cual que saque sus propias conclusiones. En lo que sí podemos estar de acuerdo es en que se trata de un animal impresionante.
¿Te animarías a tener uno como mascota? Puedes debes saber que a pesar de su alto precio, dado que nacen pocos ejemplares, ¡hay una lista de espera inmensa para adquirir uno!
Foto de portada vía estilosdevida.bolsamania.com