Si te planteas la pregunta «¿Le puedo dar a mi perro cualquier tipo de leche?», lo primero que tendrás que tener claro es si los perros pueden beber leche o no. Te invitamos a descubrir todos los detalles relacionados con este asunto.
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¿Los perros pueden beber leche?
Hay opiniones muy contradictorias sobre si los perros pueden beber leche o no. La realidad es que, en parte, esto va a depender de la etapa vital de tu perro.
Es decir, si tu mascota es un cachorro o ya es un perro adulto.
¿Cuándo pueden beber leche los perros?
Si quisiéramos ser muy concretos, se podría decir que los perros pueden beber leche cuando son cachorros. De hecho, la leche es muy importante para los perros recién nacidos, pero no cualquier leche. Solo la leche materna.
El calostro es un líquido que segregan las glándulas mamarias de las hembras mamíferas y que se caracteriza por poseer muchas proteínas y sales minerales, además de poca lactosa.
Ese calostro es el primer alimento que toman los cachorros, ofreciéndoles todo lo que necesitan en esas primeras horas de vida.
Concretamente, el calostro y la leche materna son muy importantes para los cachorros porque les aportan:
- Nutrientes.
- Anticuerpos.
- Son esenciales para su crecimiento.
Por tanto, los perros cachorros pueden y deben beber leche. Pero, ¿qué pasa con los perros adultos?
Como sabéis, la leche contiene lactosa, lo que viene siendo azúcar. Para poder digerir bien la lactosa y que la leche no siente mal, existe una enzima que se produce en el intestino delgado que se llama lactasa. Pues bien, el problema de los perros adultos es que su organismo, a medida que estos crecen, dejan de producir esta enzima.
Eso significa que siendo cachorros sí que la producen y de ahí que puedan digerir la leche, pero siendo adultos ya no sucede lo mismo.
Por tanto, si tu mascota ya es adulta y te preguntas si le puedes dar leche, la respuesta es que es mejor no hacerlo, pues posiblemente le siente mal.
Entonces, ¿no le puedo dar leche a mi perro?
Como hemos visto, los cachorros pueden tomar leche materna. Sin embargo, en el caso de los perros adultos la cosa es más delicada.
Algunos perros pueden ser más sensibles a la lactosa que otros, y los perros de razas más pequeñas tienden a tener más dificultades para digerirla. Por lo tanto, es importante tener en cuenta la tolerancia individual de cada perro antes de ofrecerle leche.
Como esto no lo puedes saber de antemano, la opción sería hacer una pequeña prueba. Puedes darle un poco de leche a tu mascota y fijarte en sus reacciones posteriores. Si muestra síntomas de problemas digestivos como vómitos, diarreas, náuseas, flatulencias, etc., lo mejor es que no le des más leche.
Además, el consumo de leche en perros también podría llegar a dar alergia al animal, mostrando señales como enrojecimiento de la piel, urticaria, inflamación del hocico o, incluso, dificultad para respirar.
¿Le puedo dar cualquier tipo de leche a mi perro?
En el caso de los perros cachorros, la lactancia materna es fundamental. Por ello, es relevante no separar a un cachorro de su madre hasta que no haya cumplido, al menos, las 8 semanas de vida.
Si por determinadas circunstancias se diese el caso de una separación forzosa, la leche a aportar al perrito sería leche maternizada. Este es un producto especial de venta en centros veterinarios, cuya preparación asegura que los canes reciben los mismos nutrientes que recibirían de su propia madre.
En el caso de los perros adultos, ya hemos comentado que la leche no suele ser apropiada para ellos. No obstante, en caso de querer ofrecerles un poco, se pueden considerar algunos aspectos.
La leche de vaca no es apropiada para ellos por su alto contenido de grasa y de lactosa. Sin embargo, existen alternativas a la leche de vaca que pueden ser más seguras para los canes.
La leche de cabra u oveja es una opción que algunos perros pueden tolerar mejor, ya que contiene menos lactosa que la leche de vaca. Sin embargo, aun así, es necesario tener precaución y observar cualquier reacción adversa.
Además, como hemos dicho, se pueden encontrar en el mercado leches especiales para perros, formuladas específicamente para su digestión. Estas leches suelen ser libres de lactosa y están diseñadas para proporcionar los nutrientes necesarios para los perros sin causar malestar estomacal.
De todas maneras, no olvides que la leche nunca debe ser la base de la dieta de tu mascota, pues esta debe estar compuesta, principalmente, por proteína cárnica.
Además, dar demasiada leche a un perro puede llevar a un desequilibrio nutricional y a problemas de peso. Adicionalmente, la recomendación es consultar siempre con tu veterinario de confianza.
Ahora ya conoces la respuesta a la pregunta “¿Le puedo dar a mi perro cualquier tipo de leche?”. Pero… ¿Te has preguntado alguna vez también si los gatos pueden beber leche? ¡La respuesta te sorprendería!
