Uno de los procesos naturales por los que pasan los hámsteres cada año es por la muda de pelo. ¿Has adoptado a uno de estos pequeños roedores recientemente y quieres saber más sobre esta condición? ¡Te hablamos de la muda de pelo en el hámster!
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¿Qué es la muda de pelo en el hámster?
La muda de pelo es un proceso natural que ocurre en la mayoría de los hámsteres y otros animales, pues también se da la muda de pelo en gatos o en perros, por ejemplo.
Durante este proceso, los animales, en este caso los hámsteres, pierden parte de su pelaje viejo para dar paso a uno nuevo.
La muda es mucho más evidente en primavera y otoño, cuando las temperaturas y la duración del día cambian, lo que indica a los hámsteres que es hora de adaptarse al nuevo clima estacional.
Causas de la muda de pelo en hámsteres
Hay que diferenciar la muda de una caída de pelo en el hámster anormal, pues esta segunda podría estar propiciada por enfermedades, parásitos, etc. y es importante tratarla.
La muda de pelo en el hámster es un proceso natural, como hemos dicho. Se suele dar con los cambios de estación y además es generalizada. Es decir, el pelo del animal se acaba cayendo y renovando por completo, a diferencia de una caída por patología, que puede ocasionar la caída parcial por zonas.
A continuación, te mostramos los motivos más comunes por los que se produce la muda de pelo en los hámsteres:
- Cambio estacional: como mencionamos anteriormente, los cambios en la temperatura y la cantidad de luz pueden desencadenar la muda en los hámsteres. La muda de primavera generalmente implica el pelaje más denso del invierno, mientras que la muda de otoño prepara al hámster para el pelaje de invierno.
- Crecimiento: los hámsteres jóvenes pasarán por varias mudas a medida que crecen y desarrollan su pelaje adulto.
- Hormonas: las fluctuaciones hormonales también pueden desencadenar la muda en los hámsteres.
Cuidados durante la muda de pelo en el hámster
Aunque la muda de pelo es un cambio natural, puede ser un momento incómodo para tus mascotas. Por eso, queremos trasladarte algunas pautas y cuidados específicos que puedes seguir para garantizar que tu hámster pase por este proceso de la manera más saludable posible.
Cepillado suave
Algunos hámsteres pueden beneficiarse de un cepillado suave durante la muda, uno de los cuidados del pelo del hámster.
Un cepillo diseñado para mascotas pequeñas y delicadas puede ayudar a eliminar los pelos sueltos y reducir la posibilidad de que tu hámster se lama en exceso, lo que podría provocar problemas digestivos.
Sin embargo, no todos los hámsteres disfrutan del cepillado, por lo que es importante acostumbrarlos desde pequeños, observar su reacción y no forzar la situación.
Alimentación balanceada y nutritiva
Durante la muda, el cuerpo de tu hámster necesita más nutrientes para el crecimiento de su nuevo pelaje.
Por ello, debes asegurarte de proporcionar una dieta rica en proteínas, vitaminas y minerales. También puedes hablar con tu veterinario especializado en animales pequeños para obtener recomendaciones específicas sobre la dieta de tu hámster durante este proceso.
Evitar los baños
Aunque pueda ser tentador, evita bañar a tu hámster durante la muda.
En general, los baños pueden ser estresantes para ellos y empeorar la situación. Además, estos animales son bastante limpios y se acicalan por sí mismos, por lo que en la mayoría de los casos no necesitan baños.
Limpieza de la jaula
A medida que tu hámster pasa por la muda, notarás más pelos sueltos en su jaula. La limpieza regular de la misma es esencial para mantener un ambiente higiénico y saludable.
Cambia el lecho con más frecuencia durante esa época y elimina los pelos sueltos para prevenir problemas respiratorios y otros posibles problemas de salud.
Además, debes utilizar siempre un lecho seguro y adecuado para evitar intoxicaciones o alergias en el hámster y asegurarte de que la jaula esté bien ventilada.
Comodidad
Durante la muda, es importante ofrecer a tu hámster un ambiente tranquilo y cómodo.
Evita las molestias adicionales y el estrés, proporcionándole una jaula lo suficientemente espaciosa con escondites y materiales suaves para que se acomode.
Si notas que está rascándose o lamiéndose en exceso, podría ser señal de irritación debido al nuevo pelaje que crece. Presta atención para asegurarte de que no se cause daño.
Temperatura y humedad
Los hámsteres son especialmente sensibles a los cambios de temperatura y humedad. Por ello, debes mantener su entorno dentro de un rango de temperatura y humedad adecuado para su especie.
Evita las corrientes de aire frío y asegúrate de que su jaula esté lejos de ventanas directamente expuestas a la luz solar.
Evitar manipulaciones excesivas
Durante la muda, es recomendable reducir la manipulación y el manejo excesivo de tu hámster.
Aunque es valioso continuar interactuando con él para mantenerlo socializado, evita cargarlo constantemente o perturbarlo mientras está descansando.
