Si recientemente has adoptado a un pequeño peludo, seguramente habrás notado que tu cachorro llora mucho. Pero, ¿qué le pasa? ¿Está enfermo, incómodo…? Los motivos de ese llanto pueden ser varios y hoy te hablaremos de los más comunes.
Mi pequeño cachorro llora mucho, ¿qué le pasa?
Si el llanto surge en cualquier momento del día, el motivo puede ser un problema de salud que nosotros mismos no podemos detectar, a no ser que sea algo físico y evidente.
Por ello, si esto sucede, deberás acudir con tu mascota al veterinario para que determine cuál es la causa del llanto y recomiende el tratamiento adecuado.
Independientemente de que llore o no, desde Wakyma recomendamos que cuando un cachorro llegue a tus manos, lo primero que deberías hacer siempre es acudir a la consulta de un profesional para que le haga un chequeo que confirme que el pequeño está estupendamente.
Aun siendo así, es normal que un cachorro llore los primeros días en casa, especialmente lo notarás por las noches o cuando te alejas de él.
Los motivos pueden ser los siguientes:
Separación
Cuando un perro nace, lo normal es que esté bajo la protección y cuidados de su madre los primeros meses de vida.
Si tu peludito ya no está con su madre, llorará porque se sentirá inseguro y desprotegido, especialmente cuando llegue la noche.
Lo normal es que en una semana el perro se haya adaptado mejor a su nueva situación, pero no debes descuidarlo mientras se acostumbra.
Para ello, puedes ayudarle de varias maneras. Un reloj de agujas debajo de su camita puede hacer que se relaje un poco, ya que el sonido le recordará a los latidos del corazón de su mamá. Si esto lo puedes acompañar con una prenda que lleve el olor de la perra, muchísimo mejor, aunque entendemos que será complicado si se trata de un perro abandonado.
Por otro lado, es importante recordarte que no siempre que llore debes correr a acariciarle o subirle a la cama o al sofá contigo, ya que asociará su llanto a tu completa atención y eso puede influir en su comportamiento futuro.
Incomodidad
Si tu cachorro llora mucho, otro de los motivos por los que puede suceder es que se sienta incómodo. ¿Has elegido la mejor camita para él? ¿Es cómoda o lo has puesto simplemente sobre una sábana sobre el suelo?
Recuerda que si no se trata de un peludo abandonado, posiblemente habrá estado bajo el cobijo y la comodidad del cuerpo de su madre hasta hace muy poco.
Además, puede ser que el lugar donde hayas ubicado su cama no sea el correcto. Asegúrate de que no pasa ni frío, ni calor y que no hay ruidos que puedan provocarle ansiedad. Si tu cachorro llora mucho, este puede ser uno de los motivos más probables.
La falta de ejercicio
Pero, obviamente, no solo los ruidos podrían provocarle ansiedad. ¿Sabías que la falta de ejercicio también puede hacerlo? Esto puede suceder en todas las etapas de su vida, pero especialmente siendo perros cachorros o jóvenes, ya que sus niveles de vitalidad son altísimos. ¡Ya lo habrás notado!
Lo mejor que puedes hacer para que tu peludito no llore por este motivo, es ayudarle a que haga ejercicio durante el día para que descargue toda su energía.
Si aún es muy pequeñín y no está preparado para empezar a salir a la calle, déjale que corretee y explore por casa con tu supervisión para que no sufra ningún daño.
De esta manera también le ayudarás a que conozca mejor su nuevo entorno cuanto antes y se adapte con mayor rapidez.
Mala digestión
Otro de los motivos por los que tu perro puede llorar por las noches (o en cualquier momento tras haber comido) es por una mala digestión.
Esto puede deberse a que su alimentación no es la adecuada o a que ha comido más de lo que le correspondía.
Los perros necesitan cubrir unas necesidades nutricionales concretas en cada etapa de su vida, comer las raciones correctas y comida de calidad. ¡Asegúrate de estar alimentando a tu cachorro debidamente para que no sufra problemas digestivos!
¿Qué hago si mi cachorro llora mucho cuando me voy?
Si tu perro no conoce su entorno y tú lo sueles dejar solo, es normal que también llore. De ahí la importancia de dejarle que explore tu casa y se adapte a ella lo antes posible.
Además, cuando el perro ya se haya hecho a ti, le ayudará bastante que le dejes una prenda de ropa tuya cerca, pues tu olor irá en ella y eso calmará a tu perrete.
Por otro lado, ¿sabes que la música también puede calmarle? Hay melodías que vienen muy bien a las mascotas, así que puedes acostumbrarle a que las escuchen y dejárselas puestas cuando salgas de casa.
Y sobre todo, cuando vuelvas, ¡dale todo el cariño que se merece!
