¡Mi perro come piedras! Pues te vamos a decir que no es el único que lo hace, es una costumbre más común de lo que pueda parecer de primeras, pero no por eso beneficiosa. En ocasiones, los perros pueden masticar piedras o ramas, o incluso tragarlas. Pero ¿por qué lo hacen? ¿Cómo es de peligroso? Hablamos de ello.
Por qué mi perro come piedras
Los perros a veces pueden comer todo tipo de cosas extrañas en la calle, desde piedras y ramas como arena, barro, hojas, tierra de macetas… Todo tipo de cosas. Las causas de este mal hábito son:
- Pica: lo que se conoce como pica es el comportamiento compulsivo de comer cosas que no se deberían y está catalogado como enfermedad. No sólo ocurre en los perros, sino también en otras especies, incluida la humana.
- Período de dentición: durante la época de dentición es normal que los perros (igual que los bebés) tiendan a morder todo tipo de cosas para intentar aliviar las molestias. Para evitar que corran peligro comiendo piedras, es importante enseñarles a morder juguetes aptos para ello.
- Aburrimiento o ansiedad/estrés: en estas circunstancias, un perro puede tener todo tipo de conductas compulsivas y extrañas.
- Falta de nutrientes: una deficiencia nutritiva puede llevar al perro a comer cosas inapropiadas.
- Malas conductas no corregidas: a veces a los dueños puede parecerles divertido que un perro coma piedras, palos u otras cosas de la calle, pero no lo es. Si tu perro lo hace, ¡necesita ayuda urgente!
- Enfermedad o malestar: algunos perros, cuando tienen dolores internos, comen cosas pensando que les van a ayudar, cuando realmente ocurre lo contrario.
Mi perro come piedras, ¿es peligroso?
Muchísimo. Para empezar, puede hacerse daño en la boca y romperse los dientes, pero el peligro va más allá, ya que las piedras pasan por todo su sistema digestivo. Pueden arañar, desgarrar y obstruir su garganta, estómago e intestino. Lo mismo ocurre si come palos, ya que puede tragarse astillas que le dañarán.
La costumbre de comer palos, piedras o cualquier otra cosa no apta para el consumo podría incluso acabar con la vida de tu perro. Si le pillas haciéndolo, ¡debes acudir inmediatamente al veterinario! No esperes a ver si las expulsa o no con las heces, ese momento podría no llegar y producírsele úlceras, desgarros, atascos… Todo tipo de problemas. Es importante que se le haga una ecografía de inmediato y se tomen medidas.
Cómo evitar que mi perro coma piedras
Tanto si es la primera vez que lo ha hecho como si es una costumbre arraigada, es fundamental que la corrijas cuanto antes. Para evitar que tu perro coma palos, piedras o cualquier otra cosa, no le quites el ojo de encima cuando vayáis de paseo y llévalo siempre atado, o suéltalo sólo cuando estés seguro totalmente de que podrás controlarlo sin problemas y que las condiciones de seguridad son apropiadas.
Si ves a tu perro cogiendo un palo o una piedra dile NO para que la suelte. Si no lo hace, tendrás que quitársela tú, pero déjale claro que esto no está bien. Si a tu perro le gusta jugar con objetos por la calle, tirar y recoger o perseguir, hazte con un frisbee, pelota o cualquier otro juguete para perros; así no sentirá necesidad de coger piedras.
Juega y haz ejercicio con tu perro durante los paseos, haz que sean activos y divertidos, que no se aburra en ningún momento. Nunca seas violento con él para intentar corregir estos malos hábitos, con comprensión y paciencia lo conseguirás.
Que un perro coma piedras es un hábito que se debe corregir cuanto antes. ¡No dudes en pedir consejo veterinario!